Jueves 28.03.2024 | Whatsapp: (221) 5710138
16 de noviembre de 2017 | Gremiales

Entrevista REALPOLITIK.FM

Pablo Abramovich: “Se ataca a los trabajadores judiciales para justificar privilegios de los jueces”

En diálogo con RADIO REALPOLITIK(www.realpolitik.fm), el secretario general de la Asociación Judiciales Bonaerenses habló sobre la reforma judicial que planea implementar el gobierno: “Macri ataca las 30 horas semanales que trabajamos pero omite que los jueces cumplen sus obligaciones yendo medio hora a su despacho”, sentenció.

facebook sharing buttonCompartir
twitter sharing button Twittear
whatsapp sharing buttonCompartir
telegram sharing buttonCompartir
print sharing buttonImpresión
gmail sharing buttonCorreo electrónico
por:
ALEJANDRO COSTANZO

En diálogo con RADIO REALPOLITIK(www.realpolitik.fm), el secretario General de la Asociación Judiciales Bonaerenses habló sobre la reforma judicial que planea implementar el gobierno: “Macri ataca las 30 horas semanales que trabajamos pero omite que los jueces cumplen sus obligaciones yendo medio hora a su despacho”, sentenció Pablo Abramovich.

A continuación, lo más destacado de la entrevista.

RP.- ¿Qué piensan desde la Asociación Judiciales Bonaerenses (AJB) sobre los dichos de Mauricio Macri acerca de lo que cobran los trabajadores judiciales?

Quieren instalar una idea falsa y construir conclusiones a partir de eso. El presidente dijo cómo puede ser que un ordenanza gane más de 100 mil pesos por servir café y la realidad del poder judicial, tanto provincial como nacional, es totalmente diferente: un ingresante cobra 15.600 pesos, y la gran mayoría menos de 25 mil. 
RP.- En estos días se está trabajando la reforma judicial en la Corte Suprema, ¿qué opinión tiene al respecto?

Creemos que es necesario un debate sobre cómo reformar la Justicia porque el poder judicial está en una crisis muy profunda, sumado a un nivel de confianza muy bajo por parte de la ciudadanía. Hay que analizar las causas de fondo para establecer el porqué de la lentitud de la justicia, que tiene resoluciones inentendibles y no por cuestiones técnicas, sino porque los jueces no investigan determinadas cosas. 
Además, para nosotros hay dos temas importantes que, lamentablemente, Macri no mencionó. Uno es el presupuesto del poder judicial: en la provincia tenemos un 4 o un 5 por ciento del total, con todo lo que pasó en estos veinte años en términos de crecimiento de la población y de la litigiosidad; el otro eje es el sistema de selección de magistrados que tenemos, es decir quién elige a los jueces y por qué se destituyen. Hoy, la corporación política de turno, que es el Pro pero en su momento era el FPV y antes el PJ o el radicalismo, selecciona dentro de su grupo de interés a aquellos jueces y fiscales que garantizan la subordinación al poder político, marcándoles qué controlar, denunciar o investigar. 

RP.- Macri focaliza en el poco tiempo que trabajan los empleados judiciales, ¿cree que con más horas de trabajo se solucionarían aspectos de la Justicia? 

La feria judicial es una forma que se eligió históricamente para compatibilizar el régimen de vacaciones con el funcionamiento del poder judicial. En éste período, los organismos que tienen que dar respuesta permanente, como la justicia penal o de familia, tienen sus respectivos juzgados en actividad.

La cuestión de fondo pasa por la capacidad de la justicia para resolver la cantidad de causas y en qué tiempo; lamentablemente la eliminación de la feria no cambia ésa ecuación: si los 20 mil trabajadores, que se toman la feria en enero, se la tomaran en diciembre o marzo, el problema sería el mismo. Aumentando la cantidad de días hábiles o el horario, se modifica la entrada del sistema, es decir que puedan ingresar más causas; pero a la hora de la salida, es decir la capacidad de dictar resoluciones, todo seguiría igual si no se modifica la cantidad de organismos y de trabajadores que hay. En la provincia tenemos una falta estructural de personal y de dependencias que es endémico. 

RP.- ¿Cuál es el mayor problema de la lentitud de la Justicia?

El presidente atribuye esto a la tecnología como si el poder ejecutivo no fuera responsable de aportar los recursos para invertirlo. Actualmente hay un funcionamiento híbrido: una parte está digitalizada y otra en papel; si hubiera más inversión en informática, el procedimiento sería un poco más ágil. De todas maneras, el principal cuello de botella radica en el recurso humano, es decir los empleados, que son funcionarios de magistrados, y tienen que despachar los expedientes, sumado a dictar resoluciones. Aunque se incorporaran 10 mil trabajadores más, si no se cambia éste sistema producto de la rosca política entre el gobierno de turno y las fuerzas de oposición, vamos a seguir sin tener un filtro que garantice la llegada de los mejores y que tengan la independencia suficiente para dictar las resoluciones que indica la ley.
Otra cosa más que omite el presidente, que ataca las 30 horas semanales que trabajamos, es que la mayoría de los camaristas van dos veces por semana o que algunos jueces cumplen sus obligaciones yendo media hora a su despacho, y hasta algunos ministros de la Corte van un día a la semana. Es decir que se muestra un lado de la ecuación, atacando al sector que sostiene el funcionamiento del poder judicial con jornadas de 7, 8 y 9 horas, y no se visibilizan el resto de las cuestiones que son estructurales. 

RP.- Teniendo en cuenta que el horario de los jueces no está regulado y tienen la libertad para disponer de sus tiempos, ¿está mal dirigida la reforma?

Lo peor es que está regulado: se establece que los jueces tienen que ir diariamente a sus despachos, pero no se aclara si tienen que quedarse más de cinco minutos. También, se dictamina que los jueces de Cámara tienen que trabajar mínimamente dos veces por semana; esto evidencia la garantía de que no haya ningún control. 
Otro problema más es que hay una delegación de funciones: la gran mayoría de los jueces no dictan sentencia, sino que la firman mientras se van a dar clases en las facultades. Los funcionarios, que deberían realizar resoluciones previas al proceso, terminan realizando las tareas de los jueces. 

RP.- ¿Se puede establecer un número de las causas que maneja un juzgado?
Es muy difícil llegar a un dato concreto, hay muchas diferencias entre los departamentos judiciales. Lo que sí puedo decir es que hay miles de causas en trámite por juzgado. Un poder judicial que tiene 22 mil trabajadores para responder a más de 17 millones de bonaerenses, está sistemáticamente condenado a colapsar. Además, no hay organismos de control que determinen la eficiencia de los juzgados, por lo que tenemos perspectivas complicadas. 

RP.- Al gobierno parece no interesarle éste colapso, simplemente se dedica a empeorar las condiciones de trabajo de los que menos ganan. ¿Es así?

El problema es que no existe la preocupación por discutir los temas de fondo, el objetivo es otro: deslegitimar las condiciones de empleo del poder judicial. Se puede pensar que nuestra situación es de privilegio si se tiene en cuenta que la mitad de los trabajadores del país gana menos de 10 mil pesos, pero tenemos que discutir cuáles son nuestros derechos. Claramente se busca equipar muy hacia abajo, degradando el salario de los trabajadores: ése es el objetivo principal. (www.REALPOLITIK.com.ar)

 

*La entrevista se realizó en el marco del programa Te la Debo en RADIO REALPOLITIK.

 


ETIQUETAS DE ESTA NOTA

Pablo Abramovich

¿Qué te parece esta nota?

COMENTÁ / VER COMENTARIOS

¡Escuchá Radio Realpolitik FM en vivo!