Estos hechos comenzaron cuando la nena tenía nueve años, efectuando tocamientos impropios. Todo ello ocurría en horas de la tarde –luego del colegio- y por la noche si su madre estaba ausente en el domicilio familiar, perdurando a lo largo cinco años. Por todo ello, el Tribunal del TOC 13 de la Ciudad de Buenos Aires lo condenó en 2016 a 14 años de prisión.
Sin embargo, actualmente el abusador trabaja en la zona de Claypole, al sur de la Provincia de Buenos Aires, instalando ventanas y puertas “Es una aberración porque ya hay una sentencia”, lamentó la madre de la víctima, Sara Carina Barni, en diálogo con REALPOLITIK. Además, amenaza a la familia dejando su camioneta a 300 metros de la casa, a la distancia de la restricción judicial.
Este martes, la Cámara de Casación Penal puede hacer efectiva la sentencia y otorgar justicia a la víctima, aunque no se descarta que Coronel siga en libertad. “Por la nueva ley de víctimas mi hija tiene el derecho y quiere preguntarle al tribunal por qué sigue libre”, contó Barni. (www.REALPOLITIK.com.ar)