Hasta el día de ayer, el ministerio de Trabajo bonaerense, con sede central en calle 7 entre 39 y 40, se se encontraba envuelta en un foco de reclamos ante las disposiciones establecidas por el gobierno de Axel Kicillof sobre el aislamiento social en relación al avance del coronavirus. En este sentido, trabajadores se comunicaron con este medio para relatar la situación que atravesaron hasta hace algunas horas. “Estuvimos trabajando a pleno. Siguió la actividad normal, a contramano del decreto nacional”.
Cabe destacar que la provincia había adherido al protocolo dispuesto por el presidente Alberto Fernández que establecía la concurrencia del 10 por ciento del personal de la administración pública para mantener el funcionamiento básico y de emergencia. Además, exigieron que se suspendan las audiencias y las asambleas con gremios.
Sin embargo, trabajadores del ministerio provincial narraron que: “El martes una empleada tuvo que tomar once audiencias entre los representantes de las patronales, abogados y empleados”. Y cerró: “Pusieron en riesgo la salud de todos y los sindicatos hacen silencio ante esta situación”.
Ahora, con la el decreto del presidente de la nación, el panorama promete llamarse a la calma en forma obligatoria. (www.REALPOLITIK.com.ar)