La portavoz del Gobierno, Gabriela Cerruti, admitió que la vicepresidenta Cristina Kirchner no respondió los intentos de comunicación de Alberto Fernández luego del ataque a su despacho en el Congreso acontecido la semana pasada mientras se votaba el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) en Diputados. “El presidente se comunicó, sin tener respuestas, con la vicepresidenta, así como con su secretario privado”, aseguró la ex legisladora porteña en una ronda de prensa en la Casa Rosada.
Sin embargo, Cerruti consideró que este quiebre personal “no afecta la gobernabilidad”. Y se explayó: “Somos una coalición que tiene diferentes miradas internas sobre diferentes temas, avanzamos convencidos de que la unidad no solo del Frente de Todos sino de todos los argentinos es fundamental en este momento. Sobre relaciones personales no comento, las relaciones políticas entre el presidente, la vice, el Senado y Diputados están armoniosas y llevándose adelante”.
Como era de esperar este reconocimiento no pasó desapercibido porque expresa la decisión del gobierno de aceptar públicamente una ruptura en las conversaciones entre los Fernández. Uno de los dirigentes opositores que se jactó de este anuncio oficial fue el intendente de Tres de Febrero, Diego Valenzuela, que twiteó: “Grave que el presidente y la vice no tengan fluidez en el diálogo. En este momento tan delicado, necesitamos responsabilidad institucional de las máximas autoridades del país”.
Sin embargo, no es la primera vez que el jefe comunal bonaerense señala el cortocircuito -ahora confirmado- entre la dupla presidencial, y ya en otras ocasiones había instado a que dejen sus diferencias particulares de lado para priorizar la situación que atraviesan los argentinos. Días atrás, también Valenzuela había apuntado contra el ejecutivo por el cierre de las exportaciones de aceite y harina de soja que sembró la duda acerca de un eventual aumento de estas retenciones del 31 al 33 por ciento.
“Estuve en San Nicolás en la cena previa a Expoagro. Las autoridades provinciales y nacionales presentes nunca manifestaron que este iba a ser el camino. Las palabras y las buenas intenciones se contradicen con los hechos y las decisiones. ¡Se sigue castigando la producción!”, manifestó indignado el alcalde de Tres de Febrero en defensa del sector rural.
Lo cierto es que con este panorama rupturista en el seno del oficialismo parece difícil que la coalición continúe unida para revalidar su mandato en las elecciones del próximo año. (www.REALPOLITIK.com.ar)