El rector de la Universidad Nacional del Chaco Austral (UNCAUS), Germán Oestmann se encuentra actualmente imputado, junto a otras 45 personas, por lavado de activos. Así lo señaló el juez federal de Sáenz Peña, Miguel Aranda, al tiempo que aseguró que “serían varios delitos más”. Acusado de lavar más de 172 millones de pesos a través de la fundación Educación para Todos, Oestmann continuó ostentando su cargo de rector y se negó a renunciar, a pesar de los numerosos pedidos en esa línea.
Horas después de conocida la denuncia, se supo que sobre Oestmann pesan además dos pedidos de prisión preventiva por coaccionar y amenazar a asambleístas de la universidad en octubre del año pasado, durante una asamblea en la que se pretendía declarar la nulidad de la elección que lo llevó a su cargo.
En el mes de mayo, UNCAUS reconoció a Cristina Fernández de Kirchner con el título de Doctorado de Honoris Causa.
No es éste el único salario que quedó en la mira en los últimos días. El vicerrector de la universidad, Manuel García Solá, se adjudicó un salario bruto de 1.280.487 de pesos más, que se sumarán a los gastos de representación y viáticos. La figura de García Solá tampoco está libre de controversia, dado que fue apuntado por los propios docentes de la UNCAUS por vivir en la ciudad de Resistencia y no asistir con asiduidad a su trabajo a pesar de su jugoso sueldo. Además, percibe otro ingreso de la empresa Litoral Biológicos SRL.
Los salarios de Oestmann y García Solá, más los viáticos y los gastos de representación suman, unidos, unos 4.2 millones de pesos mensuales. A pesar de lo escandaloso de la información, la misma política salarial se adoptó para el resto de las autoridades de la UNCAUS.
En total, considerando los aumentos recientes en sus sueldos, los reportes de docentes de la Universidad Nacional del Chaco Austral muestran que el costo total de los directivos asciende a más de 19 millones de pesos mensuales. (www.REALPOLITIK.com.ar)