Wado-Manzur a las presidenciales, Massa senador y Kicillof por la reelección

La fortaleza de las boletas bonaerenses contrasta con la debilidad de la del ejecutivo. Si bien Juan Manzur puede aportarle el respaldo de algunos gobernadores, la figura de Wado de Pedro no parece demasiado sólida ni instalada. Tal vez, como deslizó con picardía Daniel Scioli, en el cuarto oscuro ella termine votando por el “Pichichi”.

Se cierra así una etapa de la política argentina. La autoexclusión electoral de Cristina Kirchner confirma su declinación y su deseo de tomar distancias con el protagonismo que supo ejercer durante una década y media. También la imposición de la interna en las PASO y la necesidad de garantizar la participación de la lista opositora en esa instancia para evitar la judicialización son señales inequívocas de su epílogo.

Ahora Alberto Fernández podrá retirarse habiendo cumplido sus dos objetivos principales: garantizar la democratización del PJ y, tal vez, terminar con veinte años de kirchnerismo. 

Por estas horas, Daniel Scioli vive un momento de júbilo: está convencido de que el voto popular le permitirá imponerse sobre un candidato al que parece faltarle mucho tiempo de cocción para estar a punto.

La oposición también celebra lo que interpreta como la rendición de la vicepresidenta. Más allá del resultado, Cristina confirmó que sólo le interesa tratar de retener la provincia y que da por perdida la elección general.

Juntos por el Cambio deberá abandonar la guerra civil intestina y prepararse para gobernar. Aunque la debilidad de su adversario electoral invita a postular que, seguramente, la interna se volverá cada vez más sangrienta, ante la evidencia de que el retorno al gobierno nacional está cada vez más próximo. (www.REALPOLITIK.com.ar)