8 de agosto de 2023 | Municipales
Tanto por sus prácticas como por su presencia y sus negocios, Fernando Espinoza cargaba consigo la contradicción de haber sido indispensable en materia electoral, pero muy difícil de ser exhibido en actos públicos que trascendieran a su distrito. Su pésima reputación le impedía -y le impide- sumar un solo voto fuera de allí, al tiempo que espanta a muchísimos potenciales votantes.
Nunca se llevó bien con el Evita ni con la mayoría de los movimientos sociales. Tampoco se caracterizó por sus buenas relaciones con La Cámpora. Se lo acepta solo por su caudal electoral local.
Si bien, durante años, quienes pretendieron cuestionar su liderazgo terminaron lamentándolo, la situación parece haber cambiado sustancialmente con la postulación como precandidata a intendente de Patricia Cubría, la diputada provincial y compañera de Emilio Pérsico, ya que detrás de ella se alinea la mayoría de los movimientos sociales y de las agrupaciones que esperan, desde hace mucho tiempo, desplazar a Espinoza.
Todo se complicó con al menos una denuncia de abuso ejercido sobre una empleada de la municipalidad por parte del intendente. Si bien el tema quedó cajoneado, el desprestigio de Espinoza se incrementó aún más. Cierto es que los fogoneros de la causa fueron quienes pretendían jubilarlo. Algunos para conseguir llegar a la intendencia.
Las presiones que se ejercieron hasta último momento del cierre de listas para que otra fuera la acompañante del gobernador en su intento de reelección, con Máximo Kirchner como principal promotor, estuvieron a punto de llevar a la ruptura de la coalición en la provincia. Pero fracasaron, por lo que Espinoza mantuvo su precandidatura a la reelección, con la sombra amenazante y creciente de Cubría.
Por primera vez, el largo reinado de Espinoza está amenazado seriamente. A punto tal que Sergio Massa debió suspender su programada caminata por el distrito junto al intendente para evitar confrontar con el Evita. Massa amablemente recibió a Cubría y hubo foto. Inmediatamente Cristina Kirchner salió a respaldar a Espinoza para mantener el equilibrio interno. Pero quedó planteado el dilema de qué ocurrirá con el “fuego amigo” de quienes sean derrotados en las PASO. ¿Continuarán en la coalición o le pasarán factura, incrementando así las chances de JxC?
Dentro de una semana, con las cartas sobre la mesa, se podrá comenzar a responder este interrogante. (www.REALPOLITIK.com.ar)