A la deriva

No sólo el mediato, ya que su convalidación causaría daños irreparables para la economía, la sociedad y el futuro de todos los argentinos, sino también el inmediato: si la ley sale tal como la aprobó Diputados, el gobierno saldrá fortalecido y la oposición profundizará su proceso de fragmentación y esterilización. Paradójicamente es la oposición quien tiene en sus manos la definición del futuro. Y hasta podría darse el caso de que con su subordinación a las políticas nacionales esté firmando su propia sentencia de muerte.

Por cierto que también se abren otras alternativas variopintas. El Senado podría modificar varios capítulos del proyecto al que dio media sanción Diputados, o bien incluir los cambios que vienen trabajando en conjunto Martín Lousteau y UxP. Todo es provisorio, impredecible. La distancia entre la ficción y la realidad resulta imperceptible, y así las mayorías legislativas se construyen y reconstruyen, cada vez más lejos de la grieta tradicional entre el cristinismo y JxC.

El gobierno, por su parte, apuesta como siempre a la confusión general. Este martes se denunció un ataque contra la vivienda personal de Sandra Pettovello –cada vez más comprometida por las causas de corrupción que van saltando a la luz cada día-, aunque la policía la desestimó: sólo se trataba de una llamada al 911 de una vecina del country donde habita, quien argumentó haber escuchado “ruidos extraños”. También los comunicadores políticos del gobierno difundieron un supuesto chantaje sobre la ministra de Capital Humano, que habría consistido en la comunicación de alguien no identificado de que tendría en su poder un video de la ministra teniendo sexo en un baño público. O bien el gobierno pretende victimizarla, o bien la interna facciosa se profundiza aceleradamente, mientras que el presidente hace todo lo posible para sostenerla, aun cuando su hermana Karina, Patricia Bullrich y Santiago Caputo ya le hayan soltado la mano.

Con la sanción o la denegación de la ley Bases se anuncian cambios varios en el gobierno. Diana Mondino es cada vez más un cadáver político; Mariano Cúneo Libarona parece atravesar su último tramo de gestión; Martín Menem está en la mira; y los secretarios de Educación y de Salud ya son dados por despedidos. También se registraron dos nuevas renuncias, para superar el récord de una cada cuatro días desde el inicio de la gestión; Sturzzenegger no termina de asumir la cartera prometida y “Toto” Caputo podría estar transitando su tramo final como ministro, con un dólar blue en 1300 pesos, con casi un 50 por ciento de brecha; productores agrarios que no liquidan; dólares que no aparecen; un Banco Central que en lugar de comprar divisas norteamericanas las vende para frenar el incremento descontrolado de todos los paralelos; y, por si fuera poco, la incertidumbre sobre si habrá que pagar el SWAP chino y el del Banco de Basilea.

Mientras que este sórdido e inestable panorama gana en profundidad, el presidente asegura que retirará el proyecto de ley si le hacen más cambios, mientras que se dedica a retuitear en su cuenta una falsa encuesta que asegura que los norteamericanos preferirían al propio Milei por sobre Donald Trump como próximo presidente norteamericano. La consultora a la que se adjudicó el estudio aseguró que la encuesta nunca existió. También el inestable mandatario insiste en celebrar la victoria de Vox y su propia contribución a ese resultado, cuando la fuerza derechista española hizo una de las peores elecciones de su historia, y retrocedió en un 50 por ciento de votos respecto de las precedentes.

Sin pronósticos claros sobre la magnitud de la movilización contra la ley que tendrá lugar en simultáneo con su tratamiento, sólo queda la percepción de que se trata de un evento decisivo para el futuro de los argentinos. Ojalá que a quienes les corresponde definirlo los ilumine la razón y el bien común al momento de expresar su voluntad. (www.REALPOLITIK.com.ar)