18 de junio de 2024 | Municipales
El intendente de San Isidro, Ramón Lanús, enfrenta una ola de críticas y descontento por parte de los vecinos debido al significativo aumento de las tasas municipales. La agrupación Acción Vecinal de San Isidro ha tomado la iniciativa, convocando una sesión especial para exigir explicaciones sobre este incremento que califican de "incomprensible".
Acción Vecinal ha señalado que se trata del "mayor aumento de tasas de toda la historia de San Isidro", con un incremento que alcanza casi el 200% en lo que va del año. Además, califican el aumento como "ilegal". La agrupación critica no solo el aumento del 25% de las tasas municipales realizado sin la debida aprobación legal, sino también la implementación retroactiva de estos aumentos, lo cual infringe el principio de irretroactividad de la ley.
La situación se agravó cuando el oficialismo local bloqueó la sesión especial convocada por Acción Vecinal, dejando a muchos vecinos sin respuestas y aumentando la desconfianza hacia la administración municipal. La negativa a proporcionar una explicación clara ha generado un clima de tensión y descontento generalizado entre los contribuyentes.
La resolución firmada por Lanús establece pagos retroactivos al 1 de mayo en una amplia gama de derechos y tasas, que incluyen:
- Derechos por Publicidad
- Derechos de Oficina
- Uso de Playas y Riberas
- Ocupación o Uso de Espacios Públicos
- Espectáculos Públicos
- Tasas de Cementerio
- Fondeadero
- Servicios Varios
- Comercialización de Envases no Retornables y afines
- Servicios de Gestión de Residuos de Obras, Áridos y Afines
- Gestión de Residuos a Grandes Generadores
Esta amplia gama de ítems afectados ha exacerbado el descontento, ya que impacta en diversos sectores de la comunidad, desde negocios hasta servicios públicos.
La medida ha sido vista como un golpe a la economía local y un acto de insensibilidad hacia los residentes que ya enfrentan desafíos económicos. Las críticas no solo provienen de Acción Vecinal, sino que también resuenan entre otros sectores políticos y sociales que ven en este aumento una falta de consideración hacia los ciudadanos.
El descontento se ha manifestado en redes sociales y en protestas locales, con muchos residentes exigiendo que el intendente y su equipo reconsideren estos aumentos y proporcionen una justificación clara y transparente.
La gestión de Ramón Lanús se encuentra en una encrucijada, con la comunidad exigiendo respuestas y acciones que mitiguen el impacto del aumento de tasas. La falta de transparencia y de una comunicación efectiva solo ha servido para aumentar la desconfianza y el descontento entre los vecinos. San Isidro se enfrenta a un momento crítico donde la administración municipal deberá encontrar una solución que equilibre las necesidades financieras del municipio con la capacidad de los contribuyentes para hacer frente a estos incrementos.