Menos extranjeros, más recursos: Salta recuperó 50 millones de pesos y fortaleció su sistema de salud

En medio del debate por el uso de los recursos públicos en los sistemas sanitarios provinciales, Salta muestra resultados concretos tras la implementación de una política polémica pero efectiva: el cobro de atención médica a extranjeros no residentes. En lo que va del año, solo 141 ciudadanos de otras nacionalidades accedieron al sistema público de salud, una cifra que marca una fuerte caída en la demanda externa y permitió a la provincia recuperar más de 50 millones de pesos entre enero y mayo de 2025.

La medida, impulsada por el gobernador Gustavo Sáenz y reglamentada desde 2024, busca garantizar la sostenibilidad del sistema de salud sin desatender urgencias humanitarias. Según datos oficiales, lo recaudado por la atención a personas extranjeras fue reinvertido directamente en infraestructura, equipamiento y mejoras operativas. Uno de los logros más visibles fue la compra de 34 nuevas ambulancias, distribuidas estratégicamente en hospitales del interior.

El ministro de Salud Pública, Federico Mangione, celebró el impacto de la normativa: “No se trata de excluir a nadie, sino de cuidar lo nuestro. Esta decisión permitió mejorar la atención a los salteños, con mayor disponibilidad de turnos y mejores condiciones en hospitales y centros de salud. Hoy los resultados hablan por sí solos”.

Distribución del ahorro: hospitales con mayores ingresos por atención a extranjeros

El Hospital de Cafayate lidera el ranking con 31 atenciones que generaron una facturación de $446.500. En segundo lugar, el Hospital de Orán recuperó más de $14 millones con solo 14 pacientes extranjeros. Otros centros de salud también presentaron cifras destacadas: el Hospital Güemes, con una sola atención, recuperó más de $10 millones; el Materno Infantil, con cinco ingresos, generó más de $4,2 millones; y el Hospital San Bernardo, también con cinco pacientes, superó los $4,9 millones.

Este esquema de cobro no solo permite ingresos extraordinarios, sino que también ha tenido un impacto estructural: la congestión en las salas de espera se redujo, se agilizaron los turnos y mejoró la atención para los pacientes locales. “Los hospitales funcionan con mayor eficiencia y nuestros equipos médicos tienen más recursos para trabajar dignamente”, añadió Mangione.

Caída sostenida en la atención a extranjeros

Los efectos de la medida también se observan al comparar con años anteriores. En 2024, la reducción en la atención a extranjeros fue drástica: el Hospital Salvador Mazza bajó un 95,45% su demanda foránea, mientras que en San Ramón de la Nueva Orán la merma fue cercana al 90%. En el Hospital de Tartagal, el descenso alcanzó el 42,86%, y en el Materno Infantil, un 55,26%.

Además, en varias localidades estratégicas como Iruya, Aguaray, Embarcación, Mosconi y Pichanal, directamente no se registraron ingresos de pacientes no residentes durante los primeros cinco meses del año.

“Solidaridad sí, pero con responsabilidad”

Desde el gobierno provincial insisten en que la medida no busca excluir a nadie, sino administrar con responsabilidad los fondos públicos. “Seguimos siendo una provincia solidaria. Ningún caso de urgencia queda sin atención. Pero debemos garantizar que los recursos de los salteños se usen en beneficio de ellos mismos, y que nuestro sistema de salud sea sostenible a largo plazo”, afirmó el gobernador Sáenz.

Salta apuesta a consolidar un modelo de salud pública basado en eficiencia, responsabilidad fiscal y equidad territorial. Con indicadores que muestran una mejor distribución de recursos y mayor capacidad de respuesta, la provincia se muestra como un ejemplo en tiempos de crisis y sobrecarga del sistema sanitario nacional. (www.REALPOLITIK.com.ar)