29 de junio de 2025 | Municipales
Los hermanos Facundo y Gastón Manes deben estar muy sonrientes y con la carga emocional positiva por la estratósfera después de la prueba piloto realizada en La Plata tras presentar en sociedad a un frente moderado equidistante tanto del kirchnerismo como de los libertarios.
Ocurre que a ambos les viene saliendo bien su salida, sin mucho trauma, de esa olla a presión que significaba para ellos la Unión Cívica Radical (UCR) y todas las formalidades derivadas de la organicidad de un centenario partido, el más antiguo de América Latina.
Con las manos libres para decidir y sin mordaza en la boca para escapar a los condicionamientos doctrinarios que les imponía el radicalismo formal, ambos, y específicamente Facundo, se dedicó a armar sin esperar a los peligrosos obstáculos que podrían aparecer en alguna convención que, vale aclarar, ya no cuenta con la presidencia de su hermano Gastón.
Toda esta introducción tiene su validez y oportunidad para explicar que los Manes tendrán igualmente su premio y se salen con la suya ante tamaño apoyo recibido de varios sectores del radicalismo para el lanzamiento del frente de centro federal junto al exgobernador de Córdoba, Juan Schiaretti.
La imagen del encuentro -que desbordó una de las salas del centro cultural Islas Malvinas- fue elocuente en cuanto a que el radicalismo aportó con creces concurrencia y representatividad en este nuevo esquema que pretende mostrarse como el “postmileismo”. Desde el titular de la junta central, Pablo Nicoletti, a los concejales radicales Javier Mor Roig, Diego Rovella y Gustavo Staffolani hasta el diputado provincial, Claudio Frangul, dijeron presente y se pusieron a disposición por si alguien los necesita.
Hoy nace la llama de la esperanza en la Argentina 🇦🇷🔥
— Para Adelante (@ParaAdelanteok) June 27, 2025
De la mano de @jschiaretti empezamos a plantar los cimientos del país que queremos: con tecnología, desarrollo, democracia, prosperidad y que nos integre a todos.
El futuro ya empezó y es #ParaAdelante. pic.twitter.com/THNwWIFyg0
De paso, cabe señalar que nada es gratuito en este terreno de disputas y pulseadas dado que, en esa lista de personajes, hay al menos dos concejales (Mor Roig y Rovella) a quienes se les vence el mandato. Lo mismo ocurre con Claudio Frangul. Asimismo, Nicoletti no ocupa un cargo legislativo, pero quiere ocupar algún escaño desde diciembre próximo y por tal motivo no deja de ocupar primeras filas de cuanto evento político y social se desarrrolle en la capital bonaerense.
La ansiedad de los correligionarios mencionados se adelantó a toda decisión que pueda dar a conocer la conducción de contingencia del comité provincia que, también hay que señalarlo, procrastina sus resoluciones acerca de con quién conformar frentes electorales, como si fuera la Corte Internacional de la Haya.
Dicen fuentes bien informadas que Nicoletti, de la forma en que viene avanzando, ya tomó su decisión de manera inconsulta y sin esperar al comité provincia y a su provisional conducción compartida entre Miguel Fernández y Pablo Domenichini. El titular de la junta central avanza para establecer un “hecho consumado” e irreversible como para tensionar con cuanta autoridad partidaria se le presente en su camino, porque ya tomó la decisión de ir con los hermanos Manes y el peronismo cordobesista de Schiaretti.
Los voceros consultados también deslizaron que Nicoletti, aún por sobre las estructuras y rituales partidarios que debería respetar, no reparará en avanzar a entregarse a los brazos del diputado y neurocientífico Facundo Manes, porque él le puede dar el salvoconducto para convertirse en diputado provincial, en reemplazo de su archienemigo, el actual legislador Claudio Frangul.
Así las cosas, cuando la conducción de contingencia provincial resuelva cuál es el destino electoral de la UCR, ésta organización se encontrará con que ni los dirigentes seccionales le llevaron el apunte, ni esperaron un segundo para ponerse los ropajes de candidatos a algún destino que les mejore las vidas en lo personal.
Por otra parte los Manes volverán a abrazarse y concluír que nunca fue tan fácil arrastrar consigo a una masa crítica de radicales y militantes que serán necesarios en gran proporción para las mesas de campaña y fiscalización de comicios. Y para ello no debieron mover ni una pieza del tablero para demorar su tiempo en diálogos y roscas de cara a futuras convenciones o para obtener una declaración formal partidaria porque, si vamos al caso, la nutrida presencia de hombres y mujeres de Alem en el acto reciente de La Plata, ya arrojó un veredicto casi definitivo. (www.REALPOLITIK.com.ar)