15 de julio de 2025 | Interior

La pesca paralizada

Chubut: El conflicto entre el SOMU y las cámaras mantiene frenada la zafra del langostino

Las cámaras CAPIP, CAPeCA y CEPA mantuvieron su exigencia de aplicar un “sinceramiento de costos laborales” y reiteraron el pedido de reducción del 22% sobre la producción.

A más de un mes y medio de iniciado el conflicto laboral, la zafra del langostino continúa paralizada. A pesar de una nueva audiencia entre el Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU) y las cámaras empresariales, las negociaciones volvieron a naufragar. El encuentro se realizó este lunes en la sede de la Secretaría de Pesca de la Nación, en la ciudad de Buenos Aires, pero no se logró avanzar en un acuerdo salarial y el conflicto sigue sin solución.

Las cámaras CAPIP, CAPeCA y CEPA mantuvieron su exigencia de aplicar un “sinceramiento de costos laborales” y reiteraron el pedido de reducción del 22% sobre la producción, similar al que ya fue acordado con los capitanes y maquinistas. Además, buscaron incorporar en el acta una “cláusula de libertad de acción” que les permita negociar convenios individuales por fuera del colectivo, algo que fue rechazado de plano por el gremio.

Desde el sector empresario, responsabilizan directamente al sindicato por el freno total de la actividad. En un fragmento del acta firmada, aseguraron que “la única razón por la cual la flota tangonera no opera es la intransigencia del SOMU en readecuar las condiciones laborales y salariales”.

Sin embargo, desde el gremio que lidera Raúl Durdos, la lectura es completamente opuesta. Rechazan la idea de que el salario de los marineros sea “la variable de ajuste” en un contexto de crisis. Según expresaron, presentaron alternativas concretas para reducir costos sin afectar los ingresos de los trabajadores, como la aplicación del Decreto 633/18 o la exención de retenciones a las exportaciones. “Todas nuestras propuestas fueron desestimadas, no hubo voluntad real de negociar”, lamentaron.

Durante la audiencia, los representantes sindicales advirtieron que “negociar a la baja es ilegal” y que bajo ningún punto permitirán acuerdos individuales que violen los convenios colectivos vigentes. “El salario no es moneda de cambio. No vamos a permitir que se firmen actas que legalicen la precarización”, remarcaron desde el SOMU.

La próxima audiencia fue fijada para este viernes, pero mientras tanto, la flota sigue amarrada y la temporada de langostino continúa estancada, con fuertes pérdidas económicas para el sector y un clima de creciente tensión en los puertos.