5 de octubre de 2025 | Provincia

Preocupación

Médicos al límite: La crisis silenciosa que golpea al corazón del sistema de salud

En La Plata, la comunidad médica atraviesa un momento de profundo dolor. En los últimos meses, la Agremiación Médica Platense (AMP) despidió a varios colegas que fallecieron de forma prematura.

En La Plata, la comunidad médica atraviesa un momento de profundo dolor. En los últimos meses, la Agremiación Médica Platense (AMP) despidió a varios colegas que fallecieron de forma prematura, una tragedia que expone el costo humano de un sistema que exprime a los profesionales de la salud hasta el límite.

Médicas y médicos que dedicaron más de una década a formarse, con guardias interminables, posgrados y múltiples responsabilidades, hoy enfrentan una realidad angustiante: honorarios insuficientes, multitrabajo y una sobrecarga emocional creciente. A los gastos habituales —como la Caja de Médicos, el seguro, la colegiación, el consultorio y los insumos— se suman costos que aumentan por encima de los ingresos, especialmente en prestaciones con IOMA, la obra social provincial que concentra el mayor volumen de atención en la región.

Ante este panorama, la consecuencia es clara: más horas de trabajo, más guardias y menos descanso. La fatiga se transforma en estrés crónico, problemas de salud mental y, en los casos más graves, en tragedias evitables. “Estamos perdiendo vidas por un sistema que no cuida a quienes nos cuidan”, advierten desde la AMP.

Un estudio interno realizado por la entidad entre más de 700 médicos platenses reveló que el 26,4% padece síndrome de burnout, con mayor incidencia en quienes tienen más de un empleo. El 90% trabaja en más de un lugar y el 65% en tres o más. Además, más del 60% sufre trastornos de sueño y del ánimo, lo que repercute en su vida personal y en la calidad del vínculo médico-paciente.

Frente a este escenario, la Agremiación Médica Platense impulsó talleres, jornadas y un Programa de Asistencia y Protección de la Salud Médica, con foco en el burnout y la prevención del desgaste profesional. También convocó a las sociedades científicas de la región para debatir y sistematizar estrategias comunes.

Sin embargo, las gestiones ante las autoridades provinciales y el IOMA no obtuvieron respuesta. “El silencio, la desidia y la indiferencia son la respuesta institucional”, expresaron desde la entidad. Mientras tanto, el sistema sigue deteriorándose y los médicos continúan expuestos a un “cóctel explosivo” de sobrecarga laboral, desmotivación y enfermedades.

La pandemia de COVID-19 dejó al descubierto la magnitud del problema. Aquel reconocimiento social traducido en aplausos desde los balcones no se transformó en mejoras estructurales ni en condiciones laborales dignas. Hoy, La Plata —convertida en polo sanitario de la provincia— recibe pacientes de todo el territorio bonaerense, con profesionales que deben sostener la demanda a pesar de la escasez de recursos y los bajos honorarios.

“Cuando un médico muere antes de tiempo, no solo se apaga una vida: también se apaga una parte del sistema de salud”, afirman desde la AMP. El reclamo es concreto y urgente: honorarios justos, condiciones sanas de trabajo y reconocimiento real a quienes sostienen la atención pública y privada.

El mensaje final del Consejo Directivo de la Agremiación Médica Platense es claro:

“Si no cuidamos a quienes nos cuidan, estaremos condenando la salud de las generaciones futuras. La decisión es ahora. Mañana será tarde”. (www.REALPOLITIK.com.ar)