17 de noviembre de 2025 | Deportes
El instructor comenzó celebrando el resultado deportivo y humano del viaje: “La verdad que un gran esfuerzo del grupo. Los jovencitos y personas senior también, mayores de cincuenta y cinco años y adultos de nuestra región”, explicó. La delegación viajó a Heredia, Costa Rica, y logró ubicarse primera en el medallero general: “Obtuvimos la mayor cantidad de puestos primeros y segundos puestos, lo cual nos puso primeros en el medallero”.
La preparación para llegar al torneo requirió meses de ejercicios físicos, coordinación entre clubes y un fuerte compromiso de los competidores. Diego Ledesma sostuvo que el grupo entrenó en el Club 28 de Octubre, con participación de jóvenes de La Plata, Ensenada y Buenos Aires. Paralelamente, la financiación del viaje también fue un desafío: “Las familias apoyaron, nos apoyaron también algunos negocios de barrio, como la panadería San Patricio y el supermercado La Amistad”, señaló.
El maestro remarcó que cada integrante afrontó sus propios costos: “Todos nos costeamos el viaje, incluyendo el gran maestro Giuliani... Y todos los estudiantes también se pagaron su propio pasaje y la obra social, obviamente, el seguro médico y los gastos”.
La preparación física fue igual de intensa: “Hubo clases extra desde lunes a sábado y realmente entrenaban algunos dos o tres turnos por día”, contó. Los entrenamientos incluyeron pretemporada en el bosque y en el parque San Martín, además de prácticas indoor en el dojang del club.
En total, el equipo regresará con cerca de veinte medallas. Ledesma detalló: “Dos cada uno y una más por equipo… Veinte medallas aproximadamente. Fue el medallero más importante de los países, de los cinco países que intervinieron”. Los coach del equipo, Luis Valdés y el maestro Marcelo López, también fueron claves en este desempeño.
Consultado sobre el apoyo estatal, Ledesma reconoció ausencias: “Si bien sabíamos que la situación económica estaba bien compleja, por eso mismo encaramos más bien poniendo que pidiendo… En otras ocasiones sí recibimos aportes, pero en este caso no hubo”. Aun así, espera que en futuras competencias puedan recibir acompañamiento.
Ledesma también destacó el impacto formativo y académico en los jóvenes: “La gran mayoría de los chicos son estudiantes… Tuvieron que pedir permiso en la universidad; algunos están por recibir, otros están empezando o promediando la carrera”. Incluso dos integrantes debieron gestionar sus ausencias en la escuela secundaria. El grupo, además de entrenar, se autogestionó las redes sociales y la administración de fondos.

Más adelante, el maestro valoró la integración entre clubes y federaciones: “Tenemos que agradecer mucho la ayuda del profesor Raúl Ramos, que nos invita en el Club Forever a trabajar y a entrenar”, y detalló la participación previa en el torneo regional de Ensenada. Para él, la meta es clara: “Tenemos una idea de integrarnos y de hacer que el taekwondo sea una propuesta para la gente y para las personas con discapacidad también”.
Justamente, uno de los ejes más importantes de su trabajo es el taekwondo adaptado. Ledesma sostuvo que es un ámbito profundamente transformador: “Es una actividad apasionante por lo enriquecedora que es tanto para el grupo humano que tiene una condición especial como para el que no tiene ninguna condición especial”. En el torneo de Costa Rica compitieron deportistas con distintas condiciones: “Una persona sorda que compitió integralmente con las personas regulares… Y una mujer adulta con síndrome de down que desarrolló formas integradas y salió campeona del mundo también integrada”.
Para Ledesma, la clave está en no rotular: “A veces hay que chequear con esas personas para no rotularlas como que tienen una discapacidad por un síndrome o por una condición genética o sensorial”, afirmó. Mencionó también casos notables dentro de la federación, como un instructor ciego en Brasil que continúa ejecutando formas con gran nivel técnico.
La integración, subrayó, es un aprendizaje colectivo: “La situación de discapacidad puede ser transitoria o permanente y a todos en algún momento nos puede suceder… La educación inclusiva está haciendo que podamos aprender de ello”. Reconoció, además, la labor de la directora honoraria del comité de inclusión, quien comenzó a entrenar con él hace dos décadas: “Es cinturón negro segundo dan… Me ayudó mucho en la formación y en la observación de estas cuestiones”, señaló. (www.REALPOLITIK.com.ar)