19 de noviembre de 2025 | Cultura
“Siempre es una alegría tocar en La Plata. Tengo muchos amigos ahí y el baterista de mi banda, Martín Casado, es de la ciudad. De alguna manera jugamos un poco de locales”, inició Lisandro Aristimuño, que se presentará en el Teatro Municipal Coliseo Podestá con un formato trío compuesto por bajo, batería y guitarra eléctrica. “No es para nada tranqui: es un show muy bailable, con muchos samplers y secuencias. Estamos haciendo un collage de todos mis discos, con arreglos más rockeros”, agregó.
Tras un año cargado de conciertos, el artista valoró el recibimiento del público en cada punto del país. “Hemos girado muchísimo, incluso por Europa. Volvimos hace poco de tocar en Londres, Dublín, Málaga, y también estuvimos en Paraguay. En todos lados la gente responde con mucho cariño”, destacó.
Respecto del repertorio, aclaró que esta gira no incluye estrenos: “Mi último disco salió hace un par de años y este tour es un recorrido por mis veintiún años de carrera. No estoy presentando nada nuevo, pero sí reinterpretando muchas canciones con este trío que les da otra energía”.
Aunque no haya nuevo material en los escenarios, el proceso creativo nunca se detiene: “Siempre estoy componiendo. Es algo que me apasiona. Tengo mi estudio, grabo maquetas y voy registrando ideas todo el tiempo. Calculo que el año que viene voy a tener ganas de grabar algo nuevo”, aseguró.
Aristimuño destacó el valor de sostener su independencia desde sus inicios. “Soy un artista autogestivo desde que arranqué. Eso me permite elegir cuándo sacar un disco y hacerlo solo cuando realmente lo siento. No lo pienso desde un lado comercial, sino artístico”, reflexionó.
En su recorrido, realizó giras nacionales cada año, incluso en ciudades donde las condiciones económicas complican la llegada de espectáculos. “Me encanta ser federal con mi música, no centralista. Siempre busco recorrer el país y conocer nuevos públicos”, afirmó. En la actualidad, su equipo de trabajo se redujo respecto a los años de banda numerosa: “Antes éramos ocho músicos; hoy somos un trío acompañado por técnicos, producción y manager. Seremos unas nueve personas viajando”.
Sobre la respuesta del público a su nueva propuesta, celebró: “Mucha gente que nos ve seguido dice que cada show es distinto, que siempre hago algo nuevo. Me esfuerzo mucho para que cada concierto tenga algo personal de cada ciudad. Eso la gente lo agradece”.
Con una agenda apretada que lo llevó por Córdoba, Mar del Plata, Rosario, La Pampa y Neuquén, Aristimuño ya anticipa el cierre del tour en el patio del Ciudad Cultural Konex. Luego, asegura, será momento de descansar: “Después del Konex me voy al sur a ver a mi familia, a estar con mis amigos, a hacer naturaleza y a bajar un poco la vorágine. Siempre vuelvo a componer ahí, abajo de un árbol en el patio de mi mamá. Es como una cábala”.
Mirando hacia atrás, recuerda con emoción sus hitos más grandes: “Hicimos tres Luna Park agotados. Es una locura. Y es hermoso que tu familia y tus amigos de toda la vida estén ahí acompañando”.
Finalmente, valoró el rol del público en el camino que supo construir: “Sin la gente uno no es nadie. El proceso de la música se completa cuando alguien escucha lo que uno hace. Estoy muy agradecido de que sigan yendo a los conciertos y acompañando este proyecto que siempre salió del corazón”. (www.REALPOLITIK.com.ar)