Alerta en Tigre: Prohíben atender partos por falta de neonatólogos

A través de una nota el director del hospital zonal de agudos Magdalena Villegas de Martínez, ubicado en General Pacheco, prohíbe a su cuerpo de obstetras atender partos debido a la falta de profesionales que atiendan al recién nacido. La misiva lleva el sello de la decadencia del sistema público de salud bonaerense que supo ser modelo en el mundo.

La notificación la realizó el director del nosocomio, Hugo Gass, a fines de diciembre y está dirigida al jefe del servicio de Obstetricia, Guillermo Greco, donde puntualmente le pide que se “abstenga de realizar partos debido a la ausencia de neonatólogos”. En tanto descarga sobre el profesional toda la responsabilidad frente a posibles complicaciones: “El no cumplimiento de la misma responsabiliza a usted de las derivaciones que la falta de neonatólogos pudiera comprometer la salud del bebé”, le advierte en vez de mirar hacia arriba y pedirle al ministro de Salud, Andrés Scarsi, que cumpla con su deber de funcionario público y asigne un presupuesto acorde a la demanda.

El cuadro no hace más que graficar la precariedad del sistema de salud público bonaerense, largamente denunciado por los trabajadores del área en los últimos años, con un presupuesto que no alcanza para cubrir la cada vez más creciente demanda de la población. En ese esquema el personal sanitario viene advirtiendo sobre las consecuencias de las políticas de vaciamiento en áreas claves, la falta de personal y las condiciones de insalubridad que incluso reinan en diversos centros de salud y hospitales de la provincia.

El hecho suscitado en el hospital Magdalena de Martínez no es aislado, sino que forma parte de un complejo esquema que da cuenta de la triste realidad que aqueja a los sectores más vulnerables, que frente a la necesidad no tienen otra opción que caer en un hospital público. “Al día de hoy, estamos lejos de tener asegurados los planteles básicos en la mayor parte de los establecimientos, ya sea en el conurbano o en las principales ciudades de la provincia”, advirtieron recientemente desde CICOP.

La prueba está a la vista, no solo en Tigre, también los servicios de neonatología y pediatría del hospital zonal general de agudos Bocalandro, de Tres de Febrero; del Cordero, de San Fernando; el Eva Perón, de San Martín, y en Fiorito, uno de los más importantes de la zona sur del Gran Buenos Aires, no dan abasto.

Asimismo, el desmantelamiento del sistema público de salud, cada vez más notorio, es para los trabajadores de la salud el síntoma de un cambio en las políticas de estado que tienen su correlato en la decisión del gobierno nacional de avanzar de forma paulatina a la privatización del sistema de salud público y gratuito y que es modelo en el mundo a través de la implementación del programa de Cobertura Universal de Salud (CUS).

Los médicos y trabajadores de la salud lo rechazan de lleno, ya que como sostienen:  implica serias restricciones en las prestaciones que irían en consonancia con la transferencia de recursos desde el sector público al privado. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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