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1 de junio de 2018 | Nacionales

Panorama REALPOLITIK

La crisis de la ANMAC: Licitaciones falsas, coimas, extorsiones y un poderoso vínculo con el poder

“Pareciera que todo esto de las ideologías es para los giles. Solo los que la miran de afuera son de derecha, de izquierda, conservadores, liberales, de arriba o de abajo. Los que discuten en el cafecito. Los poderosos enserio, que son unos diez tipos, se pelean para las cámaras pero después se juntan todos en una mesa chica a hacer negocios”.

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Un ex secretario de Comercio nacional puso, hace ya algunos años, los puntos sobre las íes en una entrevista televisiva: “Pareciera que todo esto de las ideologías es para los giles. Solo los que la miran de afuera son de derecha, de izquierda, conservadores, liberales, de arriba o de abajo. Los que discuten en el cafecito. Los poderosos enserio, que son unos diez tipos, se pelean para las cámaras pero después se juntan todos en una mesa chica a hacer negocios”. Tal vez, las negociaciones que atraviesan a la institución que regula el uso de las armas de fuego en todo el país, la Agencia Nacional de Materiales Controlados, son una verdadera muestra gratis de la veracidad de sus dichos.

En la Argentina, actualmente hay 1,5 millones de legítimos usuarios de armas que tienen la obligación de renovar sus credenciales cada cinco años. Esto implica un promedio de 300 mil renovaciones por año. Hasta hace poco tiempo, el trámite costaba 800 pesos. Hoy cuesta 3.500. De este modo, quien gerencie el negocio recaudará un promedio de 1.500 millones de pesos anuales. Acorde a la Defensoría del Pueblo, este servicio debe ser manejado enteramente por el estado. No obstante ello, el gobierno le abrió el juego a una empresa privada en medio de una sospechosa licitación.

La licitación fue polémica por el mero hecho de su existencia. Acorde a todos los especialistas en la materia, jamás se debió permitir el ingreso de privados en el servicio. Por otro lado, la empresa Dienst Consulting SA se presentó junto a otras dos compañías cuyas carpetas fueron rápidamente desechadas. Incluso dentro del propio departamento de Compras y Contrataciones admitieron que los pliegos “parecían hechos a medida de la empresa que ganó”. Por otro lado, las otras contendientes entregaron la información incompleta y una de ellas ni siquiera envió a un representante. Todo pareciera indicar que, siendo cómplices de Dienst Consulting, sólo fueron a acompañar a cambio de un vuelto.

Pero, ¿Quiénes son los responsables de la compañía Dienst? Uno de sus socios es Guillermo Martín, quien posee estrechos vínculos con dirigentes políticos de la sexta Sección Electoral y con Hugo Moyano. Su socio en la empresa es Gustavo “El Turco” Elías, quien fue denunciado el 1° de septiembre de 2016 por Elisa Carrió por ser testaferro del líder de Camioneros. Además, Elías fue representante del sindicato de Camioneros en la administración del tren Belgrano Cargas.

En un informe de la revista Noticias con fecha de diciembre de 2016, se afirma que “Jaime Stiuso viajó en un avión Cessna Citation desde Buenos Aires a Bahía Blanca. Allí tuvo un encuentro, comida de por medio, con el empresario Gustavo El Turco Elías. De esa reunión participaron el empresario fúnebre local Juan Bonacorsi, un médico ex funcionario llamado Gustavo Mena, el fiscal local Christian Long y Lucas Nejamkis, ex jefe de asesores de Juan Manuel Abal Medina durante su gestión en la jefatura de Gabinete”. En aquella reunión se resolvió la compra, por 7 millones de dólares, del multimedios La Nueva Provincia, que pertenece a la familia del actual jefe de bloque Cambiemos de la Cámara de Diputados de la Nación, Nicolás Massot.

En otro vergonzante episodio de la política nacional, un legítimo usuario en lucha por la corrupción de la ANMAC y Dienst Consulting SA, le escribió vía whatsapp al por entonces ministro de Educación Esteban Bullrich. El mismo, luego de leer las vinculaciones de la compañía con Moyano y con el juez Eduardo Freiler, considerado “el más rico de Comodoro Py” y actualmente destituido e investigado, respondió: “No sabía. Ya lo paso. Gracias por avisar”. Pero nada ocurrió.

Una vez más, la política nacional muestra su cara más fea. Esa que se olvida de ideas, sentimientos y que sienta en una misma mesa a Hugo Moyano, Mauricio Macri y al poder verdadero, ese que muchas veces no se ve en las cámaras, a repartir miles de millones frente a los ojos de un pueblo cada día más hambriento. (www.REALPOLITIK.com.ar)


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