Los vínculos de la familia Bustos Reyes en La Pampa, socios de Ottavis en una empresa fantasma

El escándalo estalló luego del último encuentro que su hijo Francisco tuvo con la mamá y ex mujer del diputado, Laura Elías. Acorde al informe presentado por la psicopedagoga de parte, María Eugenia Andrade, quien solo lo acompañó hasta la entrada y luego se fue, el niño sufrió “una crisis de angustia” y recomendó cortar el proceso de revinculación y evitar el psicodiagnóstico.

El extraño informe de la profesional levantó inmediatas sospechas, que pocas horas después fueron despejadas con un impactante descubrimiento periodístico: Andrade es la pareja de Jeremías Bustos Reyes, dueño de la empresa Caldentech SA, dedicada a la consultoría en informática y suministros de software. La misma tiene una cuenta abierta en el banco Galicia con 1.200 pesos y durante 3 años tuvo un solo empleado: Manuel Eloy Ottavis Arias, el hermano menor de José Ottavis.

No solo ello, sino que además la compañía tiene todos los condimentos necesarios de una empresa fantasma. Su página oficial, www.caldentech.com, da error constantemente. No tiene cuentas en Facebook o Instagram ni movimientos financieros significativos. Carece, además, de cualquier plataforma de contacto.

Además, tanto el dueño Bustos Reyes como su socio Maximiliano Rosales, en un insólito intercambio de favores, fueron además contratados por la Honorable Cámara de Diputados bonaerense, por pedido del propio Ottavis.

El escándalo no finaliza en este punto, sino que se acrecienta a medida que continúa la investigación.

El vicepresidente de Caldentech SA es Federico Bustos Reyes, hermano de Jeremías. Federico es el actual titular de la dirección de Informática de la municipalidad de Santa Rosa, en La Pampa. Dicho cargo habría sido un pedido personal al intendente radical Leandro Altolaguirre, quien es un viejo amigo personal de los Bustos Reyes.

La vinculación de dicha familia con la provincia de La Pampa es patente. Tanto, que la empresa fantasma fue bautizada Caldentech por el Caldén, un típico árbol de la provincia de La Pampa. Más allá de las numerosas vinculaciones con dicha provincia, la empresa que resultó ser fantasma figura asentada en Buenos Aires, sin que se le conozca ningún cliente importante y que resulte una incógnita cómo hacen para generar sus ingresos.

Lejos de los sospechosos gustos de sus hijos, el padre de Federico y Jeremías Bustos Reyes tiene un modesto local de venta de instrumentos musicales sobre la avenida San Martín, llamado “440 Garage”.

Los negocios espurios de los hermanos Bustos Reyes son múltiples. El intendente Altolaguirre ha auspiciado encuentros de informática llamados Pampaseg, ubicado como co-organizador o sponsor junto a Federico Bustos de Caldentech. En algunas ediciones lo hizo desde su rol de concejal, y ahora, ya asumida la intendencia, como presidente de una asociación ambientalista llamada “Alihuen”.

Acorde a los propios trabajadores de la dirección de Informática de Santa Rosa, la gestión de Bustos Reyes deja mucho que desear. “Muy pocas veces se ha presentado a trabajar, lo que retrasa cualquier posibilidad de verdadero progreso en la gestión. Lo que hace es pedirle a su segundo, Nestor Gareis, que maneje a discresión las licitaciones para evitar quedar en evidencia”, aseguraron funcionarios allegados desde el palacio municipal de Santa Rosa. (www.REALPOLITIK.com.ar)   

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