Provocación: Sergio Massa se pavoneó en un acto de Felipe Solá

La presencia de Sergio Massa ayer en el Torcuato Tasso de San Telmo a la misma hora y lugar que el diputado Felipe Solá presentaba su libro “Peronismo, Pampa y Peligro” sorprendió a todos. Pero no fue una casualidad. El tigrense había dado una charla con Juan Grabois, dirigente del Movimiento de Trabajadores Excluidos, sobre gestión, economía, ingreso y empleo. Sin embargo, el tiempo que empleó Massa para abandonar el lugar resultó sugestivo. Se fue pasada las 18.30, horario previsto para la llegada de Solá. No se cruzaron porque el tigrense ya había logrado su cometido: hacerse visible.

La presencia de Sergio Massa ayer en el Torcuato Tasso de San Telmo a la misma hora y lugar que el diputado Felipe Solá presentaba su libro “Peronismo, Pampa y Peligro” sorprendió a todos. Pero no fue una casualidad. El tigrense había dado una charla con Juan Grabois, dirigente del Movimiento de Trabajadores Excluidos, sobre gestión, economía, ingreso y empleo.

Massa hizo un acting. Se mostró sorprendido cuando se cruzó con Gines García, Gildo Infrán, Daniel Arroyo, otrora sus compañeros del FR, en el lobby del Tasso y salió prácticamente corriendo. Las fotos a las que tuvo acceso REALPOLITIK así lo muestran.

Desde el espacio del ex gobernador lo tomaron como una provocación. Estaba todo el arco peronista. “Justo eligió el día de ayer para almorzar con Juan Grabois y quedarse de sobremesa cuando el salón quedó completo por la presentación del libro”, dispararon.

Los que hasta hace poco más de una semana eran compañeros de Massa, lo conocen. Saben que no da puntada sin hilo. Por eso la sobremesa se tomó como una señal. Un intento exitoso de mojarle la oreja a Solá y que se hable del libro, pero también de Massa. Para colmo, Mayra Arena, invitada a exponer en la presentación, atendió al autor.

"Este libro en el que usted es siempre el bueno de la película, habla de lo que hizo, pero no habla de su principal olvido: espero que no vuelva a olvidarse del saldo que dejan los gobiernos neoliberales como el actual y ahora tuve la oportunidad de decírselo y ya no va a tener excusas", dijo Mayra en una exposición que vale la pena leer y releer.

Antes del sablazo de la estudiante de ciencias políticas, Massa le había ganado a Solá el vip. Se quedó a almorzar con Grabois y la charla se extendió prácticamente hasta las 19.00. Una sobremesa muy larga, interpretaron los felipistas. Claro, Solá había citado a las 18.30.

“Si hubiera deseado estar presente para tender un puente con Felipe, lo hubiera esperado. Si quiso provocar, es un exabrupto. Y si se equivocaron los secretarios y no sabían de la presentación, hay que echar a los secretarios. Es raro. A Massa no se le escapa nada. Sabe perfectamente todo: lo que pasa en redes y en el ámbito político. Es un obsesivo. Cuesta entender por qué estaba allí”, dijo extrañado a REALPOLITIK Daniel Bolettieri, concejal de Almirante Brown que la semana pasada pegó el saltó y dio de baja el bloque del Frente Renovador para sumarse al espacio de Solá.

Bolettieri estuvo presente en el Tasso, vio a Massa y averiguó. “Aparentemente quedó en encontrarse con Juan Grabois para almorzar y con otros compañeros. Mirá que Buenos Aires es grande y mirá que hay días para encontrarse”, deslizó.

“Desde hace más de una semana se sabía que Felipe Solá iba hacer el lanzamiento de su libro. (Massa) almorzó. Según me dijeron los mozos llegó media hora tarde, como siempre. Se quedó haciendo sobremesa y se terminó yendo por la puerta principal del Torcuato Tasso desencajado entre todos nosotros, esquivando las fotos. Felipe retrasó la presentación esperando que hubiera marco y no se lo cruzó ni de casualidad. Pero no habló con nosotros ni con Felipe”, dijo el concejal. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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