Corrientes: Un muerto y catorce heridos tras represión en la unidad 1

Ante el avance de la pandemia, la ola de reclamos por beneficios procesales en las unidades carcelarias del país se está haciendo sentir, sobre todo por las pésimas condiciones de hacinamiento. En el caso de la unidad penal 1 de Corrientes, los detenidos exigían 150 prisiones domiciliarias luego de la confirmación de un guardiacárcel contagiado con COVID-19, quien mantuvo contacto estrecho con los internos.

Pero fueron desoídos e iniciaron una huelga de hambre, lo que derivó en un enfrentamiento entre internos y agentes penitenciarios. Si bien se desconoce el origen del conflicto, una versión sostiene que, durante un partido de fútbol entre presos, la pelota se fue para otro sector y uno de ellos trepó el alambrado para ir a buscarla. “Esa fue la excusa para romper la huelga de hambre por parte de los guardiacárceles”, señaló una integrante de la Red de Derechos Humanos de Corrientes.

Asimismo, el secretario de Derechos Humanos de la provincia, Manuel Cuevas, se mostró sorprendido ante los sucesos acontecidos porque los delegados de los pabellones y familiares “estaban conformes con el trabajo que estábamos haciendo”. Por otra parte, el subsecretario de Seguridad provincial, Luis Bravo, sostuvo que el interno asesinado murió tras “un ajuste de cuenta tras un enfrentamiento entre dos pabellones”.

Sin embargo, esta última versión se desmintió en las últimas horas tras las pericias oficiales. Al respecto, una fuente provincial calificada -que prefirió resguardar su identidad- contó en diálogo con este medio: “No pudieron instalar la versión que se mataron entre los internos por las imágenes y audios que difundimos; las redes sociales superaron a las operaciones locales de prensa”.

LA AUTOPSIA

Finalmente, las pericias determinaron que José María Candia, el interno de veintidós años asesinado, murió tras un disparo efectuado por un arma utilizada por las fuerzas de seguridad y resta establecer si la misma corresponde al Servicio Penitenciario o la Policía. Así lo informó el ministro de Seguridad de la provincia correntina, Juan José López Desimoni, echando por tierra la versión que unas horas antes intentó establecer el subsecretario Bravo. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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