
Interior
A pesar de la presión de los acreedores, de la dificultad del gobierno para cumplir con el pago del aguinaldo y la negativa a aumentar la ayuda a pymes y comerciantes, la gestión bonaerense continúa los polémicos gastos.
La situación financiera de la provincia de Buenos Aires es, posiblemente, una de las peores que haya atravesado en toda su historia. El propio gobernador Axel Kicillof aseguró que la deuda se quintuplicó en los últimos años, superando en mucho la capacidad de pago bonaerense.
Acorde a los acreedores de la gestión de Kicillof, en caso de no pagar alguno de los vencimientos de pago que el gobierno tiene durante el 2020, “se agravaría aún más la situación financiera y la incertidumbre económica”. En respuesta, desde el ministerio de Hacienda bonaerense que conduce Pablo López pidieron “negociar de buena fe. Pareciera que los bonistas están más preocupados por enviar comunicados de prensa que por presentar una contrapropuesta”.
En este contexto, resulta llamativa la compulsa Nro. 211-0041-PAB20 solicitada por Teresa García, ministra de Gobierno bonaerense, y aprobada por el propio gobernador Kicillof. A través de la misma, la provincia gastará 966 mil pesos en el mantenimiento de ocho ascensores. El objeto resulta al menos cuestionable, teniendo en cuenta la cantidad de aparatos y el hecho de que la estructura estatal se encuentra semi paralizada por la cuarentena. (www.REALPOLITIK.com.ar)
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