Kicillof se prepara para intensificar la recaudación luego de las elecciones

Durante los últimos días de agosto, el gobernador Axel Kicillof logró un acuerdo con el 98 por ciento de los tenedores de deuda provincial nominada en dólares, en una negociación que involucró a más de 7.000 millones de dólares. De este modo, y luego de 19 renegociaciones fallidas, pudo evitar a último momento el default de la provincia de Buenos Aires.

La noticia, buena en sí misma, dejó sin embargo a la provincia envuelta en la misma crisis con la que comenzó la gestión, que luego se intensificó notablemente durante el desarrollo de la cuarentena. Actualmente, la deuda, la inflación, el desempleo y la recesión son cuatro aristas que ponen en peligro la administración bonaerense.

En este contexto, el mandatario decidió intensificar las tareas de fiscalización de los agentes de la Agencia de Recaudación de la provincia de Buenos Aires (ARBA), que a pesar de la crisis económica que azota los bolsillos de los bonaerenses, saldrán a aumentar las arcas de la gestión Kicillof.

Al respecto, ya se lanzaron las primeras contrataciones destinadas a comprar la indumentaria necesaria para el desarrollo de las actividades de fiscalización de los agentes. En total, se comprarán 672 camperas impermeables con el escudo de la gestión y 672 morrales de acuerdo a especificaciones técnicas básicas. En total, el gobernador y el titular de ARBA, Cristian Girard, gastarán 5.725.440 pesos en el cometido.

De acuerdo a fuentes del organismo, los operativos de fiscalizaciones se intensificarían luego de las elecciones de noviembre, para evitar generar malestar de cara a las generales. Las acciones serán supervisadas por el propio Girard y apuntarán a recaudar dinero de los distintos distritos del territorio bonaerense y las rutas de acceso a las ciudades balnearias. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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