Un barrio de Quilmes, aislado y sin respuestas

Días atrás, el barrio de Villa Alcira, en Bernal, partido de Quilmes, celebró sus 75 años de existencia. Sin embargo, los problemas de suministro eléctrico llevan a los vecinos a tener que optar por encender el lavarropas o el aire acondicionado, dada la baja tensión. Además, la pérdida de electrodomésticos es una constante, según relatan.

Villa Alcira quedó en una barranca entre las obras de la autopista y el country Nuevo Quilmes, que elevó sus terrenos, por lo que el municipio debió colocar una estación de bombeo de agua. Sin luz, con postes y cables caídos, la bomba dejó de funcionar y numerosos vecinos comenzaron a ver entrar agua en sus casas. Aunque realizaron reclamos a Edesur y a la municipalidad que conduce Mayra Mendoza, ni uno ni otro dieron respuestas a la problemática.

“Nosotros ya hicimos nuestra parte, ahora la toca a Edesur”, respondieron funcionarios municipales a una damnificada que posee una hija con autismo. Por su parte, la oficina de la empresa eléctrica funciona con tres policías en la puerta que impiden el ingreso, solicitándoles a los usuarios el número de cliente y otorgándoles una certificación de reclamo en curso.

Durante el día de hoy, la empresa logró bombear el agua y horas más tarde una cuadrilla municipal removió un árbol caído sin precauciones. Debajo del mismo, un cable de alta tensión mató a un perro, “pero podría haber sido un chico o cualquier persona”, reconoce una de las vecinas a REALPOLITIK.

Cansados y desesperados, dado que han tenido que tirar la comida de sus heladeras, y viendo que el country que se encuentra a dos cuadras y el shopping Plaza Quilmes ya tienen plena cobertura de electricidad, los vecinos decidieron cortar la bajada de la autopista en Bernal, a la espera de que alguien los escuche. Mientras tanto, Mayra Mendoza camina zonas no afectadas por el temporal para mostrarse activa intentando evitar los insultos. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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