Chicas picantes

Una vez más, el gobierno nacional demostró su conmovedora incapacidad para manejar sus relaciones exteriores, con los habituales rebotes en su propia interna. Primero decidió echar a Julio Garro después de que el funcionario afirmar que Lionel Messi debía pedir disculpas. Después llegó el bombazo con el contundente posteo de Victoria Villarruel en la red X: “Argentina es un país soberano y libre. Nunca tuvimos colonias ni ciudadanos de segunda. Nunca le impusimos a nadie nuestra forma de vida. Pero tampoco vamos a tolerar que lo hagan con nosotros. Argentina se hizo con el sudor y el coraje de los indios, los europeos, los criollos y los negros como Remedios del Valle, el sargento Cabral y Bernardo de Monteagudo”.

Para inmediatamente rematar: “Ningún país colonialista nos va a amedrentar por una canción de cancha ni por decir las verdades que no se quieren admitir. Basta de simular indignación, hipócritas. ¡Enzo yo te banco, Messi gracias por todo! ¡Argentinos siempre con la frente alta! ¡Viva la argentinidad!”.

La publicación de Villarruel empatizó con el sentimiento de la mayoría de los argentinos, al tiempo que significó un golpe al hígado del gobierno. A pocos días de su reunión con Emmanuel Macron, lo último que precisaba Javier Milei era una declaración de principios de tan alto voltaje de la vicepresidenta. El presidente, para seguir instalando su imagen internacional, debía estar a toda costa en la inauguración de los Juegos Olímpicos en París, a punto tal que destinó 500 millones de pesos para su transmisión, en una economía en la que “no hay plata” y por una señal, la TVP, que dispuso novecientos retiros voluntarios entre sus empleados.

Eso fue demasiado para Karina Milei, quien ni lerda ni perezosa hizo lo que Lila Lemoine ironizó sobre Garro: fue a “sobarle la quena” al embajador francés, argumentando que las declaraciones de Villarruel eran de orden personal y no comprometían al gobierno argentino. Demostración más contundente de sumisión colonial es difícil de encontrar, pero para la actual gestión parece ser un sello en el orillo.

No le alcanzó a la hermana presidencial con su gesto, sino que también mandó al vocero presidencial, Manuel Adorni, a atacar a la vicepresidenta en conferencia de prensa, y hasta Javier Milei admitió que Villarruel “no estuvo feliz” con sus declaraciones.

Con la reunión con Macron entre signos de interrogación y la circulación social de las declaraciones de la vicepresidenta, el gobierno nacional experimentó dos duros impactos. Villarruel, por su parte, se maneja de maravillas ante la precariedad operativa del oficialismo. Fue una de los pocos que se animó a denunciar el “colonialismo” francés sin pelos en la lengua y, por si algo faltara, fijó ese posteo en su cuenta de X, para que no perdiera visibilidad. Al ser consultado sobre las repercusiones y si habría aclaraciones o nuevas publicaciones, la contestación fue unánime: “Su respuesta es esa y no habrá otra”.

Karina y Victoria son las únicas dos funcionarias que Javier Milei no puede echar, y la puja de poder entre ambas se radicaliza cada día, dejando en incómoda situación al “jamoncito del medio”. No se le cruza la idea de entrar en conflicto con su hermana, y la enemistad con Villarruel podría significarle una catástrofe legislativa.

Mientras tanto, con algunas apariciones aisladas, la vicepresidenta suma y sigue. Su faltazo del 8 de julio en Tucumán, aduciendo razones de salud, para aparecer al día siguiente, sonriente y feliz, en el desfile del 9, enervaron a los íntimos del presidente. A la postre, ella es quien mejor se muestra como alternativa para el gobierno actual, y quien está primera en la línea de sucesión. Por si fuera poco, se reconoció como “peronista”, y aunque a muchos les cueste aceptarlo, otros -sobre todo gobernadores del palo y legisladores- están dispuestos a considerarla de ese modo, ante el despropósito que significa la oposición formal -tanto la “colaboracionista” como la “confrontativa”- al saqueo e implosión de la Argentina que comanda Javier Milei. (www.REALPOLITIK.com.ar)

¿Qué te parece esta nota?

COMENTÁ / VER COMENTARIOS