Emmanuel Danann: "La batalla cultural la hemos ganado por escándalo"

Durante la entrevista, Emmanuel Danann recordó cómo, en años recientes, él y otros fueron incluidos en una "lista negra" por cuestionar la hegemonía progresista. Según relató, esta lista contenía datos personales y fue difundida por figuras públicas, lo que lo llevó a enfrentar persecuciones judiciales. Sin embargo, a pesar de estos desafíos, se mostró optimista, señalando que "el tiempo va poniendo las cosas en su lugar", y confió en que la Justicia eventualmente tendrá que rendir cuentas por las persecuciones que ha sufrido.

Danann criticó duramente a la "oligarquía política", refiriéndose a la desconexión que existe entre la clase política y la realidad de los ciudadanos. "Los políticos viven en una burbuja, desconectados de lo que pasa en la calle", afirmó, mencionando que este fenómeno no es exclusivo de Argentina, sino que se repite en varios países de América Latina.

Uno de los temas centrales de la conversación fue el impacto de las redes sociales en la democratización de los medios de comunicación. Danann subrayó que plataformas como YouTube, Instagram y Twitter han permitido a los ciudadanos acceder a una mayor diversidad de opiniones, rompiendo con el monopolio mediático que, según él, instalaba la opinión pública en el pasado. "Ya no hay un monopolio de la opinión instalado por los mismos de siempre", aseguró, enfatizando que el éxito de los nuevos medios radica en su autenticidad y en la conexión con la realidad de las personas.

Sobre la batalla cultural, Danann se mostró confiado en que los cambios logrados son significativos y difíciles de revertir. "Aquí la batalla cultural la hemos ganado por escándalo", afirmó, señalando que incluso sectores políticos tradicionales, como el peronismo, han tenido que adaptarse a esta nueva realidad, alejándose de sus anteriores posturas progresistas.

Finalmente, advirtió sobre las posibles consecuencias de la lucha cultural en curso, especialmente en relación con las minorías oprimidas. Expresó su preocupación por una posible ola de homofobia y misoginia, como reacción a lo que él considera un mal manejo de las políticas de género por parte de sectores progresistas. Sin embargo, insistió en que la clave para el futuro es mantener el sentido común y evitar caer en la demagogia y el populismo. (www.REALPOLITIK.com.ar) 

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