El silencio cómplice en el caso Kiczka: El legado de Natacha Jaitt y las acusaciones de turismo sexual

La reciente fuga del diputado Germán Kiczka ha reavivado el eco de denuncias graves y sorprendentes que se vinculan con la pedofilia y el turismo sexual en Misiones, un tema sobre el cual Natacha Jaitt arrojó luz en su momento. Recordando conversaciones con Jaitt, es imposible no notar los detalles inquietantes que ella compartió sobre la existencia de una red de abuso infantil en esa región.

Natacha Jaitt siempre hizo hincapié en Misiones como el epicentro de estas actividades ilícitas, y mencionó al ex gobernador Ramón Puerta como presunto involucrado en el delito. Según sus afirmaciones, reputados políticos y conductores de televisión habrían estado implicados en lo que Jaitt denominaba “turismo sexual” con menores de edad. Incluso llegó a proporcionar pruebas de estos crímenes en forma de videos almacenados en su tablet.

El vínculo entre Kiczka y la figura del ex gobernador Puerta cobra una relevancia inquietante en este contexto. El hecho de que Kiczka y el hijo de Puerta, Pedro, estuvieran asociados en la empresa Cigarros Misioneros SA, como lo confirma su perfil en LinkedIn, añade una capa adicional de complejidad y sospecha. Este vínculo podría explicar el silencio sepulcral que rodea el caso, no solo en Misiones, sino en Buenos Aires y más allá. El temor de que el contenido del celular de Kiczka revele aún más detalles escabrosos es evidente y creciente.

Las denuncias de Jaitt, documentadas con pruebas sólidas y detalladas, reflejan una realidad aterradora y una corrupción de alto nivel. En una nota antigua, Jaitt revelaba cómo una organización en Misiones, dirigida por un destacado político del PJ, facilitaba el abuso de menores. Esta red, que involucraba a figuras del espectáculo, la política y el periodismo, también estaba vinculada a casos de abuso en la causa Independiente, afectando a jóvenes futbolistas.

El testimonio de Jaitt fue tan impactante que recibió el reconocimiento del ayudante fiscal Guillermo Castro. Sin embargo, a pesar de la documentación exhaustiva y la presión pública, las acciones legales no avanzaron debido a la influencia y el poder de los implicados.

El caso de Kiczka y el recuerdo de las valientes denuncias de Natacha Jaitt subrayan la necesidad urgente de una investigación transparente y completa. La verdad sobre los crímenes que ella denunció debe ser revelada, y el silencio cómplice de quienes están en el poder no debe seguir siendo un obstáculo para la justicia. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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