Reconocimiento facial: “La tecnología es extremadamente invasiva para los derechos de las personas”

Tomás Pomar inició la conversación destacando que el reconocimiento facial se encuadra dentro de la categoría de inteligencia artificial y se utiliza comúnmente en materia de seguridad. Sin embargo, en Argentina, la implementación de esta tecnología ha estado marcada por problemas graves y persistentes.

"El reconocimiento facial es una tecnología extremadamente invasiva para los derechos de las personas", advirtió. "En nuestro país, hemos tenido experiencias calamitosas con la gestión de tecnologías informáticas por parte del Estado, como las filtraciones y ataques a sistemas importantes como RENAPER o el SENASA", señaló, añadiendo que "la falta de un marco normativo adecuado agrava la situación".

Pomar destacó el caso reciente del sistema de reconocimiento facial de prófugos en la Ciudad de Buenos Aires como un ejemplo de mal manejo. "Se encontraron múltiples inconsistencias y errores en el sistema, lo que llevó a la desconexión de la tecnología", explicó. "Uno de los casos más alarmantes fue el de un imputado en el atentado contra el presidente de la Sociedad Rural, donde el sistema forense federal también demostró fallas graves".

Uno de los problemas críticos que Pomar mencionó fue la estructura deficiente de las bases de datos usadas en estos sistemas. "La base de datos usada en la Ciudad de Buenos Aires estaba tan mal estructurada que en 2019 se descubrieron datos absurdos, como niños menores de cuatro años con pedidos de captura por delitos graves", relató. Además, Pomar citó el caso de Ivar Rola, un ciudadano que fue detenido erróneamente debido a errores en el sistema, destacando los peligros de detenciones arbitrarias.

En relación con la problemática global del reconocimiento facial, Pomar explicó que existen dos tipos de uso: preventivo y forense. Mientras que el uso preventivo, como el de las videocámaras en la vía pública, está en retroceso a nivel mundial, el uso forense es más discutido pero se realiza con una mayor transparencia en otros países. "Es preocupante que en Argentina se estén implementando tecnologías que están siendo descartadas en otras partes del mundo", comentó.

Pomar también hizo hincapié en la necesidad de una mayor transparencia en las contrataciones tecnológicas por parte del estado. "Es crucial pedir transparencia sobre qué tecnologías se adquieren, cómo funcionan y quién paga por sus errores", afirmó. "Debemos evitar que el estado adquiera software sin una adecuada revisión y sin exigir responsabilidades por los errores cometidos".

Finalmente, instó a los ciudadanos a estar informados y a exigir que el estado actúe con mayor responsabilidad en la implementación de tecnologías críticas. "Es fundamental que todos entendamos que las problemáticas sociales no se resuelven con tecnología, sino con políticas públicas adecuadas y con una supervisión efectiva", concluyó. (www.REALPOLITIK.com.ar) 

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