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Bruno cuestionó el carácter radical del anarco-capitalismo promovido por el Gobierno nacional y advirtió sobre la falta de una mirada social en la toma de decisiones.
En un gesto que marca tensiones internas dentro del universo libertario, el diputado neuquino Alberto Bruno —integrante del bloque Fuerza Libertaria en la Legislatura provincial— se distanció abiertamente del modelo que impulsa el presidente Javier Milei y de quienes lo siguen “ciegamente”. Bruno cuestionó el carácter radical del anarco-capitalismo promovido por el Gobierno nacional y advirtió sobre la falta de una mirada social en la toma de decisiones.
“Nosotros no somos anarco capitalistas como se define el Gobierno nacional y todos aquellos que hoy están encolumnados ciegamente detrás del presidente”, afirmó tajante. Para Bruno, la idea de desintegrar el Estado es una fantasía que no se ajusta a la realidad del país: “Argentina no está preparada para no tener un Estado”.
El legislador explicó que, si bien comparte ciertos principios liberales, su bloque tiene un enfoque diferente, que prioriza políticas con sensibilidad social. Como ejemplo, citó el pedido que elevó esta semana en la Legislatura neuquina para que se revierta la resolución del Ejecutivo nacional que suspendió la cobertura total de medicamentos para jubilados.
“Es totalmente injusto. Hoy un jubilado tiene que decidir entre comprar medicamentos o comprar comida. Esa disyuntiva es inaceptable”, remarcó. Y fue más allá: “El gabinete del Gobierno nacional no tiene los cuadros políticos que puedan tener una mirada social”.
Bruno también repudió la represión policial contra los jubilados que se manifiestan cada miércoles frente al Congreso de la Nación: “Ahí se están extralimitando en el uso de la fuerza. Si bien estamos en contra de los piquetes y a favor de la libertad de tránsito, entendemos que en este caso hay una cuestión de vida o muerte”.
El diputado neuquino, junto a sus compañeros de bloque Guillermo Monzani y Cecilia Papa, representa un sector que intenta despegarse del seguidismo acrítico hacia la Casa Rosada. “Coincidimos con las ideas liberales que presenta el presidente, pero no somos los que a todo le van a decir ‘sí, jefe’”, sentenció.
Las declaraciones de Bruno no sólo reflejan un quiebre discursivo dentro del espacio libertario, sino que también abren el interrogante sobre hasta dónde puede llegar la fractura entre quienes acompañan el rumbo económico del Gobierno y aquellos que empiezan a ponerle límites en nombre de la contención social. (www.REALPOLITIK.com.ar)
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