
Judiciales
El Gordo Dan sumó al excandidato kirchnerista jujeño Manuel Quintar a Las Fuerzas del Cielo, profundizando las contradicciones ideológicas y las internas en La Libertad Avanza.
Tras la presunta purga de cuadros en el espacio bonaerense de La Libertad Avanza (LLA), una nueva incorporación vuelve a encender la polémica. Se trata de un excandidato kirchnerista en Jujuy que, bajo el auspicio del influencer libertario Daniel Parisini -conocido popularmente como el “Gordo Dan”-, fue sumado a la agrupación Las Fuerzas del Cielo, uno de los núcleos más cercanos al oficialismo libertario.
En una foto que circuló esta semana, puede verse al propio Gordo Dan posando junto al diputado jujeño Manuel Quintar, excandidato del Frente de Todos en 2021. La imagen selló un nuevo capítulo de contradicciones internas que atraviesa el armado de los hermanos Javier y Karina Milei.
La Libertad Avanza parece haberse transformado en un verdadero refugio para dirigentes con pasado K. Los casos se multiplican con frecuencia inquietante: cada vez son más los exfuncionarios o militantes del peronismo que encuentran un lugar en el esquema libertario, desplazando a quienes originalmente encarnaban los ideales de la “nueva política”.
Lejos de la épica de renovación prometida por Karina Milei y Eduardo “Lule” Menem, el armado evidencia fisuras profundas, alimentadas por improvisaciones, negociaciones opacas y acuerdos que contradicen el discurso refundacional del espacio.
La reciente incorporación de Manuel Quintar a Las Fuerzas del Cielo no hace más que acentuar estas tensiones. Quintar, que fue candidato a diputado nacional por el Frente de Todos en Jujuy, había sido originalmente convocado por Carlos Kikuchi, uno de los primeros armadores nacionales de Milei. Sin embargo, en el balotaje de 2023, militantes de LLA en Jujuy lo acusaron de operar activamente a favor de Sergio Massa. “Necesito que cambien la boleta, que saquen la de Milei y pongan la de Massa”, habría exigido a la militancia, según testimonios recogidos en ese momento.
A pesar del escándalo, Quintar nunca fue apartado del espacio, y su presencia fue aceptada con llamativa normalidad por los referentes de la agrupación libertaria. Su permanencia parece reflejar una lógica cada vez más evidente en La Libertad Avanza: la pertenencia ideológica ha sido reemplazada por la conveniencia táctica.
En paralelo, la supuesta purga en Buenos Aires puso de relieve las internas más ácidas del espacio. La disputa de poder entre Sebastián Pareja —coordinador bonaerense— y el asesor presidencial Santiago Caputo dejó al descubierto el clima de enfrentamiento. Según fuentes internas de LLA, Pareja habría difundido en medios afines que Caputo no tiene injerencia real en el armado libertario, con el objetivo de bajarle el precio y reafirmar que únicamente Karina Milei, "Lule" Menem y él mismo tienen voz y voto en la confección de listas tanto en la provincia de Buenos Aires como a nivel nacional.
En este contexto, el desembarco de un exkirchnerista en el corazón del mileismo más puro no solo desnuda las contradicciones discursivas del oficialismo, sino que también deja entrever la fragilidad de un espacio que, entre purgas, reciclajes y roscas, parece navegar sin brújula ideológica. (www.REALPOLITIK.com.ar)
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