Conflicto en el hospital Garrahan: “En el último año y medio se perdieron alrededor de doscientos cargos"

“El conflicto tiene dos caras: por un lado, el de los residentes, y por otro, el de la planta permanente. En el caso de los residentes, trascendió que habría una recomposición salarial, pero fue solo a través de Twitter. No hubo una comunicación oficial ni fueron citados para una reunión formal, por lo que las medidas de fuerza continúan”, explicó la doctora Rita Fernández.

Además, alertó que el conflicto se agrava dentro del personal estable del hospital: “Se había convocado un paro de la planta para el jueves, pero llegó una conciliación obligatoria. Aún así, se exige una fecha concreta de audiencia para discutir salarios. Tendremos una asamblea para definir los próximos pasos”.

Uno de los datos más alarmantes que reveló la médica que integra la Asociación de Profesionales y Técnicos del Hospital Garrahan es el nivel de éxodo profesional que atraviesa el hospital: “En el último año y medio se perdieron alrededor de 200 cargos entre jubilaciones que no se repusieron y renuncias de profesionales altamente capacitados que se van al sector privado en busca de mejores condiciones laborales. Esto no solo afecta la atención sino también la cadena de formación médica”.

Consultada sobre los salarios actuales, Fernández evitó dar cifras personales pero detalló: “Un médico que recién empieza, con un cargo de cuarenta horas y guardias, no llega a los 200 mil pesos. Hay enfermeros, técnicos y otros trabajadores con salarios por debajo de la línea de pobreza”.

También desmintió los dichos del gobierno nacional, que argumenta que no hubo desfinanciamiento sino que “el hospital estaba lleno de administrativos y ñoquis”. “El anuario oficial del hospital demuestra que la planta asistencial representa cerca del 67 por ciento del total. De los 800 trabajadores que se mencionan, muchos no son solo administrativos: hay técnicos, profesionales no médicos, ingenieros, abogados. No se puede hacer funcionar el Garrahan sin ese personal”, señaló.

Finalmente, Fernández expresó su preocupación por el futuro del hospital: “No sabemos si el objetivo es cerrarlo o privatizarlo, pero esta es la primera vez en treinta años que vivimos una situación así. No hay diálogo, no hay sensibilidad, no hay respuesta. Sentimos que hablamos con la pared. Si esto sigue así, el hospital va a dejar de poder funcionar”.

“Estamos todos los trabajadores muy unidos en este reclamo, más allá de nuestras ideas políticas. Decir que esto es un conflicto politizado en sentido partidario es una falacia. El conflicto sí es político, porque tiene que ver con la decisión del estado de abandonar o no a los sectores más vulnerables. Pero acá lo único que hacemos es defender la salud pública”, concluyó la pediatra. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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