
Interior
El movimiento, que consolida la dependencia política del partido amarillo respecto al oficialismo provincial, quedó sellado en un encuentro realizado el sábado 31 de mayo.
En un giro que confirma la desintegración de su identidad partidaria, el PRO de Neuquén oficializó su apoyo al Frente Neuquinizate del gobernador Rolando Figueroa de cara a las elecciones legislativas del 26 de octubre. El movimiento, que consolida la dependencia política del partido amarillo respecto al oficialismo provincial, quedó sellado en un encuentro realizado el sábado 31 de mayo.
Allí se definió no solo respaldar la estrategia electoral del mandatario patagónico, sino también trabajar activamente en la conformación de alianzas para engrosar las filas de Figueroa de cara al Congreso Nacional, donde el Frente Neuquinizate aún no cuenta con representación propia, a pesar de mantener puentes con legisladores como Osvaldo Llancafilo, Tanya Bertoldi y Lucila Crexell.
Durante la reunión también se proclamó a Leticia Esteves —actual secretaria de Ambiente y Recursos Naturales del Ejecutivo— como nueva titular del PRO en la provincia, en reemplazo del diputado Marcelo Bermúdez. La designación refleja una fusión casi total entre partido y gobierno, una situación que el politólogo Lasse Paniceres no dudó en calificar como la “dinamitación del sistema de partidos”. “El PRO no existe más, existe Leticia Esteves”, sentenció.
Por su parte, el ex presidente partidario Bermúdez justificó la alianza con Figueroa destacando logros compartidos, como la sanción de la Ficha Limpia, la reducción del gasto público y obras de infraestructura. Pero esa narrativa no alcanza para ocultar la creciente pérdida de autonomía del PRO, que tras años de posicionarse como fuerza opositora en Neuquén, ahora se subsume dentro de la estructura de poder que antes cuestionaba.
El analista Alejo Pasetto lo dijo sin rodeos: “Sumarse al Frente Neuquinizate formalmente para las legislativas es consolidar lo que comenzó en la campaña 2023”. Y es que la inserción del PRO en el gobierno de Figueroa no es nueva: ya viene gestándose desde la integración de figuras como Esteves al gabinete y los acuerdos parlamentarios con legisladores como Damián Canuto y Verónica Lichter.
A cinco meses de las elecciones, el gobernador neuquino suma músculo político mientras absorbe a los partidos tradicionales. El PRO, por su parte, parece haber optado por la disolución como estrategia de supervivencia. (www.REALPOLITIK.com.ar)
¿Qué te parece esta nota?
MÁS NOTICIAS