“La causa Maradona tuvo un triste final por la corrupción del poder judicial”

“Narcisismo, ego y corrupción del poder judicial es lo que vivimos”, denunció, haciendo referencia al juicio por la muerte del ídolo popular. Martín De Vargas representa a Dahiana Madrid, enfermera de guardia el día de la muerte de Maradona, y a Ricardo Almirón, quien estuvo a cargo el turno anterior. Según relató, la causa judicial está marcada por graves irregularidades que podrían derivar en la nulidad de todo el proceso.

El letrado apuntó contra la jueza Julieta Makintach, quien se incorporó al Tribunal 3 de manera cuestionada: “Detectamos que se había autodesignado para ocupar la vacante que había en el tribunal”, explicó. De acuerdo con su testimonio, esta designación no siguió el procedimiento legal previsto, que exige un sorteo para garantizar imparcialidad. “Todo tiene un procedimiento ritualizado precisamente para que no haya sospechas de parcialidad. En un caso tan emblemático y público, esto era fundamental”, sostuvo.

A pesar de las objeciones, los otros dos jueces, Sabarino y Di Tomaso, “convalidaron la integración irregular”, denunció. Incluso, cuando la cuestión fue apelada, la Cámara declaró el incidente como abstracto. “Muerto el perro, se acabó la rabia. Así quedó confirmada en el tribunal”, ironizó.

La situación tomó un giro aún más polémico cuando se reveló que las audiencias estaban siendo registradas para un documental. “La resolución de la jueza era parte del guion de una miniserie”, aseguró De Vargas. “Todo estaba guionado, capítulo por capítulo, desde el principio al final del juicio”, añadió, visiblemente indignado.

El abogado también cuestionó el apartamiento de su defensa durante el juicio: “Nos pidieron el apartamiento sin fundamentos jurídicos, con el pretexto de un supuesto conflicto de intereses que no existía”, comentó. Finalmente, denunció que Makintach, pese a ser suplente, se sentó en la silla del presidente del tribunal: “Se sentó en el medio, en la posición del presidente, perfecta para la toma del documental”.

Para De Vargas, el papel de los otros magistrados fue clave en este desenlace: “Por culpa de ellos hoy tiene este triste final la causa Maradona”, expresó. Si bien aún no hubo sentencia, el proceso se encuentra en un limbo judicial que obliga a su reinicio.

“Estamos en un entretiempo, futbolísticamente hablando”, graficó. “Si se hubiera llegado a una sentencia y se conocía el documental, la sentencia era nula por la parcialidad de una de las juezas”, subrayó.

Por último, recordó el rol de los principales imputados: “Leopoldo Luque, Agustina Cosachov y Díaz estaban a la cabeza. Después, los demás iban a ser todos absueltos”, opinó, diferenciando el nivel de responsabilidad entre los profesionales de la salud.

De Vargas lamentó el impacto que este nuevo revés tiene en la familia del exfutbolista: “Es muy triste que tengan que revivir todo esto otra vez. El juicio se va a hacer, pero con otro tribunal y otros jueces”, concluyó. (www.REALPOLITIK.com.ar) 

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