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Carlos Fara, consultor y analista político, dialogó con RADIO REALPOLITIK FM sobre el escenario electoral de cara al 2025. Durante la entrevista, analizó el endurecimiento del oficialismo hacia el Pro, la interna radical, la posible condena de Cristina Fernández de Kirchner, el rol de Javier Milei y el incierto futuro del macrismo.
“El Pro es todo violeta”, ironizó Carlos Fara en referencia al avance de La Libertad Avanza sobre los socios amarillos. Según el analista, tras la elección en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el oficialismo se agrandó y ya no hay espacio para una integración pareja: “Quieren mantener la marca cristalina, que sea violeta sin manchas amarillas”. En este sentido, anticipó un “tire y afloje” entre ambas fuerzas hasta la inscripción de alianzas en julio.
Consultado por el rol de la Unión Cívica Radical, Fara aseguró que el radicalismo “está en una situación incómoda”, especialmente porque muchos sectores acompañan las iniciativas del gobierno en el Congreso de la Nación Argentina, lo que los aleja de sus tradiciones socialdemócratas. Aun así, señaló que los radicales buscan defender sus posiciones locales frente a una posible “ola violeta”, aunque advirtió: “Toda la gente que se entusiasmó con La Libertad Avanza no quiere relegar lugares para el Pro”.
Uno de los puntos más destacados de la charla fue el análisis del posible regreso de Cristina Fernández de Kirchner a la escena electoral. Su candidatura por la tercera sección electoral bonaerense ya generó un fuerte impacto, con mensajes que apelan a su rol de antagonista directo de Javier Milei. Para Fara, su sola presencia “nacionaliza cualquier discusión”. Incluso con una eventual condena judicial en su contra, el consultor advirtió que Cristina no estará ausente: “Aún con fallo en contra, va a ser el eje de la campaña. El mensaje va a ser claro: esto es Cristina o Milei”.
Sobre la posibilidad de una proscripción, consideró que una condena que la inhabilite podría transformar la campaña en un acto de victimización: “Cristina presa nacionaliza y galvaniza al núcleo duro del kirchnerismo. La Corte Suprema de Justicia de la Nación ya habría decidido, pero la pregunta es cuándo lo va a anunciar”. Asimismo, explicó que una condena impediría ocupar cargos, pero no necesariamente ser candidata, lo que podría abrir una disputa legal.
Fara también reflexionó sobre los antecedentes electorales del kirchnerismo en las elecciones de medio término: “Desde 2005 no ganan una. Perdieron en 2009, 2013, 2017 y 2021. Pero eso no significa que estén muertos. Ganaron en 2019 y salieron primeros en la primera vuelta del 2023”. A su entender, el espacio seguirá siendo competitivo, aunque no ve un liderazgo nacional alternativo: “Sergio Massa hizo un milagro en 2023 ganando la primera vuelta, pero no tiene el volumen político de Cristina”.
En cuanto al futuro del Pro, fue tajante: “Tiene una sola bala en la recámara: ganar la ciudad de Buenos Aires con un candidato propio en 2027. Si pierden la casa matriz, es muy difícil sostener el resto”. Según explicó, los dos únicos gobernadores que hoy sostienen el sello –Rogelio Frigerio e Ignacio Torres– tienen autonomía propia y no dependen de la marca.
Finalmente, alertó que el panorama político está lejos de estabilizarse: “Vamos hacia una nacionalización de las elecciones y un enfrentamiento directo entre dos modelos, con Cristina o sin ella en las boletas, pero siempre presente en el discurso político”. (www.REALPOLITIK.com.ar)
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