Frente Agrario: “El gobierno nacional se encargó de destruir la agricultura familiar”

“Yo pertenezco a la organización 25 de Mayo, soy responsable en el Frente Agrario Tierra Mía en La Plata, pero a nivel nacional del Frente Agrario”, explicó. En este marco, relató que su primera experiencia productiva fue con el tomate platense: “Toda la producción la hacemos agroecológica porque creemos que cuando se hace un alimento tiene que ser sano”.

La referente remarcó que están en contra del uso de agroinsumos y semillas transgénicas. “Defendemos las semillas nativas, criollas, conservadas por quienes las producen. Hay que cuidar la tierra, el medio ambiente y el agua”, subrayó. Para acompañar a productores que aún dependen de los agrotóxicos, impulsan unidades productivas que funcionan como escuelas: “Nosotros transmitimos cómo se debería trabajar la tierra y tenemos biofábricas donde hacemos preparados naturales, como el purín de ortiga, que sirve como fertilizante y enraizante”.

Consultada por el avance inmobiliario sobre el cordón hortícola, denunció: “Estamos mal, lamentablemente muy mal. Denunciamos continuamente porque duele que se pierdan tantas tierras productivas para hacer barrios privados. El Estado está muy ausente en ese sentido”. Según advirtió, las inmobiliarias especulan con alquileres altísimos a productores bolivianos, lo que termina forzando su salida de las quintas.

En este contexto, Palomo cuestionó con dureza al oficialismo: “El gobierno nacional se encargó de destruir todo lo que es la agricultura familiar, cerrando el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y el INAFSI, que fueron herramientas valiosas para los pequeños productores. Con este personaje siniestro que tenemos hoy en día nada se puede, ni siquiera el diálogo”.

Por último, valoró el trabajo de rescate del tomate platense que lleva adelante desde hace más de dos décadas: “Este año se cumplen 20 años de fiesta del tomate platense, pero yo ya venía produciendo hace 25 años. Fue una experiencia muy linda porque logramos conservar una semilla que estaba en riesgo de desaparecer frente a los híbridos”.

“A mí me encanta trabajar la tierra, vengo del campo y siempre digo que es un placer. Ser solidario y cuidar la semilla también es parte de nuestra identidad como productores”, concluyó. (www.REALPOLITIK.com.ar) 

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