
Judiciales
El falso psicólogo Daniel Jorge Martínez fue procesado por estafa, ejercicio ilegal de la medicina y abusos sexuales contra varias mujeres, pero pese a las graves acusaciones sigue publicitándose y atendiendo como si nada.
El juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Nro. 28 procesó a Daniel Jorge Martínez, un hombre de 69 años que se presentaba falsamente como doctor en Psicología, pero que en realidad utilizaba títulos apócrifos y prácticas pseudoterapéuticas para captar pacientes, manipularlas y someterlas a situaciones de violencia sexual y económica.
La causa –expediente CCC 27.232/2022, a cargo de la fiscalía Especializada en Violencia contra las Mujeres (UFEM) dirigida por la doctora Mariela Labozzetta– lo señala como autor penalmente responsable de los delitos de estafa mediante falsos títulos, ejercicio ilegal de la medicina y abuso sexual con acceso carnal, entre otros
Según la investigación judicial, entre 2017 y 2022 Martínez atendió a múltiples mujeres presentándose como psicólogo y sexólogo. Les cobraba honorarios de entre 28 mil y 31 mil pesos mensuales por supuestos tratamientos que, en realidad, consistían en numerología, lecturas de textos esotéricos, visualización de pornografía y prácticas sexuales que él mismo imponía.
El fallo detalla cómo utilizaba correos electrónicos, audios y hasta talleres grupales para reforzar la idea de que se trataba de un profesional de la salud mental. En las “terapias”, enviaba a sus pacientes a realizar masajes eróticos con colaboradoras de su equipo, como Eloísa Ponte, quien también está imputada por agresión sexual. Luego, las incitaba a encuentros de sadomasoquismo con él, bajo la excusa de ser parte del tratamiento.
En uno de los episodios más graves, ocurrido en abril de 2021, Martínez golpeó, ató, penetró oralmente y humilló a una paciente mientras le repetía que todo formaba parte de su sanación psicológica.
El juzgado también procesó a integrantes de su círculo cercano:
Las pruebas reunidas incluyen audios de WhatsApp, correos electrónicos, capturas de pantalla y transferencias bancarias, que muestran cómo Martínez dirigía la operatoria y mantenía un férreo control sobre sus víctimas, imponiéndoles “pactos de silencio” y aprovechándose de sus vulnerabilidades emocionales.
Las pericias psicológicas ordenadas por la fiscalía confirmaron que las víctimas presentan trastornos crónicos de ansiedad, insomnio, ataques de pánico, dificultades en la intimidad y desconfianza hacia los profesionales de la salud.
Los informes concluyen que el accionar de Martínez provocó daños psíquicos severos y persistentes, al punto de impedirles desarrollar su vida social, laboral y sexual con normalidad.
A pesar de los procesamientos y del embargo judicial, Martínez continúa promocionando sus servicios en redes sociales y en su página web, donde se presenta como “consultor psicológico, doctor en Psicología, numerólogo y miembro de asociaciones internacionales”.
Incluso firma correos y contratos con títulos falsos, como el de “Doctor en Psicología por la Bircham University”, una institución sin validez académica oficial.
El expediente todavía se encuentra en etapa de instrucción, pero la gravedad de los hechos y la continuidad de la actividad pública de Martínez generan alarma. Mientras la justicia avanza lentamente, este hombre sigue captando nuevas víctimas bajo la fachada de terapeuta, repitiendo las mismas prácticas que ya fueron denunciadas y documentadas. (www.REALPOLITIK.com.ar)
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