Municipales
En Morón estalló lo que todos venían oliendo: el sabbatellismo respondió con pintadas realizadas por encapuchados al desmantelamiento de su estructura dentro del municipio. El intendente Lucas Ghi los corrió del gabinete, les bajó bajo contratos y la interna del peronismo bonaerense quedó expuesta en el distrito más sensible de la primera sección.
Durante la madrugada se registraron pintadas anónimas contra el intendente Lucas Ghi en la puerta del municipio de Morón y en distintos puntos del centro de la ciudad. Testigos y registros de cámaras indican que los responsables actuaron encapuchados, de manera coordinada. Las consignas apuntaban directamente a Ghi y generaron preocupación en distintos sectores del peronismo local.
El episodio ocurre luego de un reordenamiento profundo del gabinete, iniciado tras las elecciones generales. En ese marco, Ghi dispuso la salida de funcionarios identificados con Martín Sabbatella, figura histórica del distrito y referenciado políticamente en Máximo Kirchner.
Paralelamente, auditorías administrativas detectaron alrededor de quinientos contratos sin función, lo que derivó en la baja de esos vínculos laborales. Dirigentes provinciales señalan que esta decisión fue el punto de mayor tensión entre Ghi y el sabbatellismo. La sucesión de medidas fue interpretada como un quiebre definitivo con un espacio que había mantenido control territorial durante años.
La situación adquiere una dimensión mayor al insertarse en la disputa interna del peronismo bonaerense, especialmente en la primera sección electoral, fundamental para cualquier armado provincial. Mientras Axel Kicillof intenta ordenar políticamente los distritos con vistas a su proyección futura, La Cámpora mantiene diferencias con sectores alineados con el gobernador y el sabbatellismo conserva peso en Morón, aunque hoy aparece debilitado por su ruptura con Ghi. Es qie Morón se consolidó como un distrito sensible por el rol que históricamente ocupó este sector y por las tensiones con la conducción provincial.
En este escenario, Ghi surge más próximo al proyecto político de Kicillof, mientras que el sabbatellismo —como espacio que responde a Máximo Kirchner— busca preservar su influencia territorial en medio de un reacomodamiento interno
de alto impacto. (www.REALPOLITIK.com.ar)
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