Luego de una denuncia de REALPOLITIK, allanaron la AFIP y la Aduana de Posadas

Hace poco más de veinte días, desde la redacción de REALPOLITIK se alertó sobre la grave situación que imperaba sobre el puente internacional San Roque González de Santa Cruz, que cruza el río Paraná uniendo la ciudad argentina de Posadas, en Misiones, con la paraguaya de Encarnación.

En el artículo, se detallaban las operaciones de tráfico y contrabando de productos de todo tipo, y el oscuro sistema de coimas, sobornos y aprietes que imperaba entre los “paseros” y las autoridades de la Aduana y AFIP apostadas sobre el puente.

Acorde a lo descripto por REALPOLITIK, cuando una persona decide comprar un lote mayor, recurre a un “pasero”. Habitualmente los regentea una mujer, a la que los clientes le llevan los productos dentro de bolsas de residuo. La mujer administra a una legión de paseros que aparecen entre las sombras y las humildes estructuras de la zona en pequeñas motos de baja cilindrada.

Toman la bolsa negra y, a cambio de unos pocos pesos que le dan la “madama”, cruzan la mercadería hacia la Argentina. Cada uno de ellos hace decenas de viajes por día. Todo esto frente a los ojos de los agentes de AFIP y Aduana, quienes hacen la vista gorda a cambio de un monto de dinero estipulado previamente.

A raíz de dicha investigación, y por orden de la Justicia Federal, agentes de Interpol y efectivos de la Prefectura, con apoyo del Grupo de Operaciones Especiales de la Policía de Misiones, allanaron la cabecera argentina del puente internacional San Roque González de Santa Cruz (que une Posadas con Encarnación, Paraguay) y la sede central de la Administración Federal de Ingresos Públicos, sobre la calle Santa Fe de la capital provincial. Se libró, además, una orden de detención para seis aduaneros, que aún están siendo buscados por los uniformados. Llamativamente, ninguno se habría presentado a trabajar el día del allanamiento.

El abogado Santiago Dupuy de Lome, que radicó la denuncia ante el juez federal porteño Rodolfo Canicoba Corral, aseguró que la recaudación ilegal es de “30 mil a 50 mil por carril y por guardia. Se le paga al jefe de Turno, al jefe de Guardia de Gendarmería, al casillero de Migraciones para que registre rápido o no registre, y al jefe de los “paseros” para que avise si la Prefectura o la Policía Federal están afuera del puente”.

De este modo, se denunció formalmente al aduanero jefe del puente, al titular del resguardo, al jefe de turno del sector Verificación, al jefe de registro y a los paseros que cruzarían la mercadería, de la más variada. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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