Rodríguez Larreta vendería el histórico CENARD por considerarlo “tierra improductiva”

En los pasillos del Centro Nacional de Alto Rendimiento Deportivo (CENARD) es un secreto a voces desde hace dos años. El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, considera que las históricas instalaciones deportivas en las que se han entrenado y se entrenan actualmente los deportistas olímpicos argentinos son “tierra improductiva”, y se dispone a venderlas. El resultado de la operación inmobiliaria que dejaría al deporte nacional sin su principal espacio de entrenamiento, generaría un impacto ecológico de enorme magnitud e implicaría la pérdida del trabajo para unas 450 personas.

Rodríguez Larreta, no obstante, no lo ve tan así. Concentrado en los números fríos, hizo las cuentas con sus asesores y llegaron a la conclusión que podrían vender las tierras por algo más de 600 millones de dólares. La idea, de todos modos, no es propia. Nació en el seno del Fondo de Desarrollo Urbano, compuesto por desarrolladoras inmobiliarias que tuvieron la oportuna idea de sugerirle al jefe de Gobierno que si la Ciudad Autónoma de Buenos Aires continúa creciendo a éste ritmo (se aspira que pase de 3 a 5 millones de habitantes en los próximos 4 años), necesitará buscar nuevos espacios para edificar unidades adicionales.

No sería la primera vez que esto ocurre. Luego de casi 3 años de idas y vueltas legales, el gobierno logró quedarse con 13 de las 16 hectáreas que ocupaba el Tiro Federal Argentino (TFA) en Núñez. Si bien prometió utilizarlas para crear un polo tecnológico, al menos 4 hectáreas fueron finalmente utilizadas para desarrollos inmobiliarios con capital privado. Con 115 mil metros cuadrados, el CENARD promete ser el negocio inmobiliario más grande la historia de CABA.

Se derribaría, así, un instituto educativo secundario y uno terciario, un hotel con capacidad para 320 deportistas, dos pistas de atletismo, un complejo de canchas de tenis, un campo de fútbol, una pileta olímpica cubierta y una de clavados, dos complejos de pesas, gimnasios esquipados para entrenamientos de deportes de conjunto, un complejo de gimnasia deportiva, laboratorios y consultorios médicos, además de un polideportivo con capacidad para 2 mil personas y las oficinas de la secretaría de Deporte de la Nación. Todo dejará de existir bajo el puño sediento de dinero de Rodríguez Larreta y los peces gordos del Real State. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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