UPCN, Héctor Nieves y una intrincada red de usureros y empresarios deportivos

La siguiente es una cinematográfica historia real de cómo las sociedades anónimas, los dirigentes del fútbol nacional y el costado más oscuro del sindicalismo se unen para tejer una complicada red de impunidad que promete no dejar títere con cabeza. Un desafío de vida o muerte a la Justicia, que por el momento pareciera ir perdiendo la batalla.

Como explicó REALPOLITIK anteriormente, Héctor Nieves, secretario de Finanzas de la seccional bonaerense de UPCN, tiene solo dos ingresos declarados. Unos 10 mil pesos de un contrato de la Cámara de Senadores de la provincia de Buenos Aires -a donde pareciera no asistir nunca- y una facturación mensual como monotributista de 52 mil pesos mensuales. Aun así, se las arregló para gastar más de 2 millones de pesos en una camioneta BMW X3 y un vehículo Hyndai Génesis 3.8, y la friolera de 4.3 millones de pesos en un gusto personal: un palco de la cancha de Estudiantes de La Plata. Lujos de un sindicalista que se codea con la clase más adinerada de la ciudad de La Plata.

Ante la incógnita de cómo hizo para acceder a todos estos tesoros materiales, una investigación exclusiva de REALPOLITIK reveló que Nieves compró todo a su nombre utilizando, en el caso del palco, los fondos de cuatro empresas: Social Promotora SA, Promotora Social Vida SA, Credymand SA y Cinco Her SRL. La siguiente pregunta lógica es: ¿Quiénes manejan a estas empresas y cuál es su vínculo con el oscuro sindicalista?.

Estas empresas protagonizan una intrincada red de connivencias y corrupción. Credymand SA registra como principal actividad la de servicios de crédito y otorgamiento de préstamos por entidades que no reciben depósitos, que están fuera del sistema bancario y que tienen como fin el financiamiento del consumo, la vivienda o bienes en general. En criollo, es una financiera en manos de un prestamista, que se dedica a prestarle dinero a aquellos empleados de UPCN con el sólo recibo de sueldo, estén registrados en el Veraz o no.

Es sabido, este tipo de compañías suelen acaparar a la masa de trabajadores desahuciados, que luego de agotar las instancias previas (préstamo personal en el banco, financieras acreditadas y con larga trayectoria), caen en el reconocido prestamista, quien no les pide prácticamente ningún requisito. Poco le importa al titular de Credymand que muchos de sus clientes liquiden todo el dinero en el mismo día en el Bingo o en drogas, siempre y cuando cumplan con una tasa usurera que ronda entre el 35 y el 42 por ciento anual.

Al igual que la mayoría de las financieras, Credymand no se maneja con la red de bancos tradicionales, sino con entidades prácticamente desconocidas como Banco Bica SA, Banco CMF SA y Nuevo Santa Fe.

Los propietarios de la financiera vinculada con Héctor Nieves son Ricardo Héctor Liberman (tío del periodista deportivo Martín Liberman), Eduardo Fortunato Amirante y Débora Betina Babenco. Todos ellos comparten el mismo domicilio: Reconquista 458 piso 11.

Liberman no es ningún principiante en el mundo de la usura. Antes de ser propietario de Credymand fue presidente de Fincas del Sol SA, en la década del 90, en medio del escándalo de los fraudes de las AFJP, era socio de Previsol Compañía de Seguros de Retiro, Previsol Administradora de Fondos de Jubilaciones y Pensiones y Previsol Compañía de Seguros de Vida. En el año 2005 volvió al ruedo como responsable de Compañía de Inversiones y Participaciones SA y una sociedad de bolsa llamada Amirante Galitis, justo antes de fundar Credymand.

Como suele ocurrir en estos casos, todas las compañías que invierten en los caprichos de Héctor Nieves son prestamistas y sus sociedades están compuestas por las mismas personas. Por ejemplo, además de ser socio de Liberman en Credymand, Eduardo Fortunato Amirante forma parte de Promotora Social Vida SA y Social Promotora SA.

En Credymand, además, figura como socia Ana Beatriz Toschi, esposa de Fotios Cunturis, el socio de Ofelia Wilhelm, la madre de la ex presidente Cristina Fernández de Kirchner. Pese a contar con solo cuatro empleados, la financiera movió un total de 45 millones de pesos gracias a un fiduciario designado para administrar estos fondos, el Banco de Servicios y Transacciones SA. El propietario de dicho banco es nada más y nada menos que Jorge Antonio Galitis.

Además de pariente de Eduardo Fortunato, socio de Credymand, Jorge Antonio Amirante manejaba una cueva en donde se cambiaban los cheques que entregaba la AFA a los clubes de fútbol. En una maniobra mafiosa, la AFA difería los cheques a fechas lejanas y obligaba a los clubes a cambiarlos en las cuevas de Amirante, que cobraba una comisión entre el 20 y el 40 por ciento, que luego repartía con Julio Grondona.

Hoy por hoy, estos bancos creados para estructurar una de las mayores estafas de la historia del fútbol argentino son los síndicos de las financieras Credymand, Promotora Social Vida y Social Promotora, además de compartir todos los mismos nombres entre sus socios e integrantes de la comisión directiva. Estos, en un ejercicio de llamativa impunidad, financian los caprichos de un gremialista platense que, además de estar en la mira de la Justicia, forma parte de la comisión directiva de Estudiantes de La Plata. Para conocer qué es lo que los motiva a tales inversiones, basta aclarar que uno de los principales nichos de clientes para las mencionadas financieras es, nada más ni nada menos, que el gremio UPCN. (www.REALPOLITIK.com.ar)

SI TE GUSTA
LO QUE
HACEMOS

Ayudanos a seguir haciendo
periodismo con la mayor
independencia y objetividad
posible.

COLABORÁ A PARTIR DE $500

COMENTÁ / VER COMENTARIOS