Críticas a la legalización del aborto: “Es un invento que no hay actividad cerebral en un embrión”

El titular de la Academia nacional de medicina, Edgardo Young, dialogó con RADIO REALPOLITIK (www.realpolitik.fm) sobre las cuestiones que atraviesan la práctica abortiva y su posición respecto a su legalización. “No sé de dónde sacaron que no hay actividad cerebral en un embrión, es un gran invento”, aseguró.

A continuación, lo más destacado de la entrevista.

RP.- ¿Qué opinión tiene respecto a la banalización de los embarazos?

En toda mi vida estuve totalmente en contra del aborto porque despenalizarlo significa liberarlo. Yo creo que se debe contemplar, y lo dije en la cámara de diputados, la necesidad de prevención a través de la educación y los métodos anticonceptivos porque ellos no son abortivos, pero además, se debe resguardar la salud de la madre que posee un embarazado no deseado, incluso a partir de las violaciones, porque representan sólo el 1 por ciento de los casos. Es importante, para esto, una buena ley de adopción, incluso pre natal, porque hay un montón de matrimonios que aceptarían adoptar embriones.

RP.- El argumento de muchas personas que apoyan la legalización del aborto es el de que un embrión no tiene derechos porque no puede valerse por sí mismo afuera del útero…

Eso es una barbaridad, principalmente porque tampoco puede valerse por sí mismo un recién nacido, incluso un bebé de algunos meses. Esa afirmación no tiene ningún asidero científico. De hecho, al momento del nacimiento, un chico no ve bien, y eso quiere decir que la persona humana lleva consigo un proceso evolutivo, motivo por el cual, un embrión, es un ser humano en potencia. Miro con mucho asombro la opinión parecida de muchos colegas.

RP.- ¿Cree que se incorporó la figura de la objeción de conciencia para sumar más votos?

La objeción de conciencia es fundamental, porque ninguna persona puede estar obligada a ir en contra de sus principios morales, éticos o religiosos. Está bien que lo fijen por la ley, pero suena a una redundancia, porque eso es una cosa de toda la vida. Lo que yo no sé es de dónde sacaron que no hay actividad cerebral, es un gran invento.

RP.- ¿La discusión no es de métodos, sino de aborto sí o no?

Exactamente, no se trata de métodos, sino de la vida, o no. Quizá mañana aparece otra forma mejor que las pastillas, pero es una cuestión de principios.

RP.- ¿Las “pastillas del día después son abortivas”?

Los comprimidos anovulatorios inhiben la ovulación, el dispositivo intra uterino actúa a través de unos hilos de cobre e impide el acceso espermático, por lo tanto, tampoco es abortivo. Sin embargo, “la pastilla del día después” busca alterar el hecho implantatorio, es decir, también es un mecanismo anti abortivo.

Hay un gran problema de educación, por eso se necesita de una gran campaña para evitar los embarazos no deseados.

RP.- ¿Qué se puede hacer con los embriones congelados?

Nos merecemos una ley al respecto, que proteja al embarazo intra útero y a los embriones congelados. Yo sé que el doctor Federico Pinedo, junto a su grupo, está trabajando en una nueva ley de adopción en el senado. Se necesita que se avance con soluciones, no con más trabas u obstáculos.

RP.- Se dice que el estado no podría hacerse cargo, por eso se privatizaría…

Desde ya que se van a perseguir fines económicos, como tantas veces ocurre. Anteponen los fundamentos económicos a la ética. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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