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13 de julio de 2018 | Judiciales

Exclusivo REALPOLITIK

“Pepe” Albistur, el multimillonario empresario Nac&Pop, al borde del procesamiento

Son realmente escasos los integrantes del Clan Albistur-Tolosa Paz que quedan exentos de una cita con la Justicia. “Pepe” es, tal vez, el más famoso de ellos. Menudo trabajo tuvo la fiscal Mángano para investigar la totalidad de sus propiedades y empresas.

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Enrique “Pepe” Albistur nació antes, mucho antes, que su joven esposa, la concejal platense Victoria Tolosa Paz. Tanto como 1947. Su meteórico ascenso político y patrimonial, sus habilidades empresariales y su destreza para mantener un perfil bajo cuando el clima –o la Justicia –lo requerían, gestaron un sinfín de rumores, muchos de ellos cristalizados en el pedido de indagatoria ordenado por el juez Julián Ercolini por los delitos incompatibles con la función pública, defraudación a la administración pública, malversación de caudales, enriquecimiento ilícito, abuso de autoridad e incumplimiento de los deberes de funcionario público. Acorde a la fiscal Alejandra Mángano, el primer secretario de Medios de Néstor Kirchner le otorgó pautas oficiales a empresas de publicidad en vía pública con las que estaba vinculado.

Son realmente escasos los integrantes del Clan Albistur-Tolosa Paz que quedan exentos de una cita con la Justicia. “Pepe” es, tal vez, el más famoso de ellos. Menudo trabajo tuvo la fiscal Mángano para investigar la totalidad de sus propiedades y empresas. Ciertamente, desde que asumió como funcionario, el hombre ha estado ocupado. Con propiedades en la avenida Córdoba al 900, en la calle Betbeder al 400 de San Isidro, una mansión en el country Grand Bell y en la coqueta avenida Hornero en Cariló, el ex secretario de Medios tiene además un interminable derrotero de empresas como Editorial del Norte, Quintana Comunicación, SistoLemme y Cía, Publicidad Rainbow, Estación Tango, Teleroad, Grupo al Sur, Almural, Invaldi, Wall Street Vía Pública, Liberapart, Accal, ND, Equipos de Difusión, Alto Vuelo Comunicación y Onda Norte, entre otras. Todo ello, con un servicio de autónomo Categoría V, con ingresos desde 30.001 pesos. Casi una obra de magia económica.

El entramado financiero que pone en marcha la complicada estructura de empresas familiares es igualmente complejo. Su hija Agustina forma parte del directorio de Grupo Al Sur, que a su vez se articula con la firma Wall Street SA, que llegó a trabajar durante un prolongado tiempo en las calles de la ciudad de La Plata a pesar de tener vencido el contrato de explotación comercial de las pantallas transluminadas de las garitas. La misma Agustina habría creado dos sociedades offshore, Marcel LCC y Wampa Entretenimiento LCC en Florida, Estados Unidos.

Una de sus hermanas, Consuelo, estuvo casada con Alberto Dacal hijo, un empresario inmobiliario de reconocido lobby en el polémico Código de Ordenamiento Urbano que implicó un multimillonario negocio para las constructoras y una catástrofe para los servicios públicos y el patrimonio histórico de la ciudad. Además, vale recordar que Alberto Dacal Propiedades fue la responsable de firmar el contrato de alquiler de Patricio Masana, actualmente preso por haber organizado una entradera en la vivienda del intendente Julio Garro en el country Grand Bell. Por la lujosa propiedad, Dacal hizo un contrato de tan solo 5 mil pesos mensuales, en una obscena maniobra de evasión impositiva.

La mayoría de las marcas que Enrique Albistur mantiene registradas, son compartidas con otro imputado en la causa por defraudación a la administración pública y malversación de caudales, el contador Guillermo De Lella. Juntos registraron, entre otras cosas, el costosísimo teatro ND/Ateneo. Otro de sus socios es el empresario bursátil Carlos Alberto Teuly. Un dato interesante: en los Panamá Papers figura una persona con su nombre exacto como director de cinco companías offshore: Yester Assets Corp., Glanzer Corporation, Artinis Business Inc., Bedes Resort Inc. y Lilca Investment Inc..

Acorde al libro “Patria o Medios”, de Edi Zunino, el líder del Clan Albistur - Tolosa Paz “habría desviado al menos 10 millones de pesos en publicidad oficial derivada a un grupo de empresas controladas por… ellos mismos o sus familiares más cercanos”. Por ello, el juez Julián Ercolini lo citó a indagatoria en la última semana junto a sus socios políticos y empresariales, como Gustavo Fernández Russo, Alejandro Lenzberg y el mencionado Guillermo De Lella.

Fue éste, en parte, el motivo del publicitado cruce entre su joven esposa, la aún ignota Victoria Tolosa Paz, y el presidente del Concejo Deliberante de La Plata, Fernando Ponce. Todavía resuenan en las ajadas y semi abandonadas paredes del recinto las palabras del representante de Cambiemos, cuando señaló: “Saludar para el día del Periodista con las barbaridades que hizo su marido… Meter la ética en el medio es poco serio, y la verdad viendo de quién viene, más poco serio es”. La mujer de Albistur decidió judicializar la cuestión de forma inmediata, argumentando un supuesto caso de violencia de género. Para ello, recurrió a su abogado Víctor Hortel.

En una nota tan preocupante como pintoresca, el letrado que defiende a Tolosa Paz fue director del Servicio Penitenciario Bonaerense hasta que debió renunciar luego de una fuga masiva de presos en el penal de Ezeiza envuelta en sospechas de “complicidad interna”. En las redes sociales se define a sí mismo como "Negro de Mierda. Peronista. Pincharrata. Abogado Penalista. Orgullosamente K". Hoy, además de defender a la esposa de Albistur, es quien representa a Juan Pablo “El Pata” Medina.

En este marco, según supo este medio, el futuro político del Clan Albistur - Tolosa Paz no resulta alentador: en los pasillos de la Justicia es un secreto a voces el inminente procesamiento de "Pepe". La noticia sería confirmada a comienzos del mes de agosto.

Chicana de por medio, algunos se preguntan si la concejal, en lugar de defender a su marido por abandonar la gestión K convertido en millonario, repetirá la reacción ante Ponce, acusando por violencia de género a los funcionarios judiciales responsables del procesamiento. (www.REALPOLITIK.com.ar)


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