Daños colaterales: Bonadío y las detenciones que preocupan a Mauricio Macri

El juez que investiga la causa de corrupción K se despachó con diferentes pedidos de detenciones que no sólo complican a funcionarios del anterior gobierno, sino a empresarios cercanos al actual presidente.

Dos son los casos más importantes que inquietan a Mauricio Macri con respecto a las detenciones libradas por el juez federal Claudio Bonadio, la del ex director ejecutivo de la empresa Isolux, Juan Carlos Goicoechea, y la del ex gerente general de Iecsa, Javier Sánchez Caballero. Ambos tienen un fuerte vínculo con el presidente y con otros miembros de su entorno familiar.

El primero de los mencionados, Juan Carlos Goicoechea, fue favorecido por el actual presidente en la concesión de parques eólicos en la provincia de Buenos Aires, más precisamente en Miramar (General Alvarado), a través de la empresa española que este manejaba en el país hasta el 2017, Isolux, siendo removido por sospechas de corrupción.

Pero esto no es todo, el propio responsable de la empresa española en Argentina vendió las concesiones a otras que se sospecha fueron creadas por Sideco Americana, perteneciente a la familia de Mauricio Macri, en una maniobra que se sospecha estuvo planificada para que el entorno del presidente se quede con el negocio de los parques eólicos en forma indirecta. Obviamente, el presidente no se los podía dar directamente porque las críticas se caerían de maduro como sucedió con el episodio del Correo Argentino

A pesar de lo comentado, este manejo fue denunciado a principios de este año por los diputados nacionales de Unidad Ciudadana, Rodolfo Tahilade y Martín Doñate, que dieron cuenta de lo sucedido y presentaron un escrito donde se citaba diferentes notas periodísticas que hablaban de la poca transparencia en las licitaciones de diferentes parques eólicos en Buenos Aires y también alojados en la provincia de Chubut.

El otro vinculado cercano a Macri es Javier Sánchez Caballero, ex gerente general de Iecsa. El ahora detenido llegó a su puesto luego de ocupar roles directivos en Socma -la empresa de Franco Macri- que fue vendida al primo del presidente, Ángelo Calcaterra, y en donde el involucrado pasó a cumplir funciones.

Existen pruebas que Sánchez Caballero era muy allegado al presidente y efectivamente este iba a la Casa Rosada con habitualidad. Sin embargo, esto no impidió que Bonadío lo detenga en el día de ayer. Asimismo, Sánchez Caballero ya se encontraba siendo investigado por la causa del “Lava Jato”, habiendo sido inclusive señalado por los directivos de Odebrecht -la empresa involucrada- que pago coimas millonarias al gerente de Iecsa para obtener el proyecto de soterramiento del tren Sarmiento. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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