El “arrepentido” Ángelo Calcaterra será investigado por su sobrina

Si hay quienes aún piensan que el gobierno de Mauricio Macri es de improvisados, el caso del primo presidencial demuestra que en la práctica está lejos de ello. Uno de los actos que lo confirma es la forma en que Cambiemos ha sabido colocar en todas las áreas sensibles de la gestión a gente adepta dispuesta a hacer o no hacer, según convenga, lo que sea.

En esta ocasión nos referiremos a María Pía Monkes, hija de María Teresa Calcaterra, hermana de Ángel Calcaterra, alias “Ángelo” (para la familia) o “El testaferro” (para infinidad de argentinos). 

Calcaterra era uno de los hilos delgados del macrismo. Sin fueros y con empresas del grupo Macri adquiridas en condiciones harto ventajosas, cualquier investigación seria al respecto podría echar luz no deseada por el presidente. 

Por esto es que en mayo de 2016 se publicó la decisión administrativa 410/2016 firmada por el jefe de Gabinete de la Nación, Marcos Peña, y el ministro de Justicia, Germán Garavano, por la cual se designa “transitoriamente, a partir del 26 de enero de 2016 y por el término de ciento ochenta días hábiles contados a partir de la fecha de la presente decisión administrativa, a la doctora María Pía Monkes (DNI 25670152), en un cargo de nivel A – grado 0 del convenio colectivo de trabajo sectorial del Personal del Sistema Nacional de Empleo Público (SINEP), homologado por el decreto N° 2098/08, de la planta permanente de la Unidad de Información Financiera, organismo descentralizado del ministerio de Justicia y Derechos Humanos, para cumplir funciones de profesional experta en gestión de recursos humanos, con carácter de excepción a lo dispuesto por el artículo 7° de la ley N° 27.198 y con autorización excepcional por no reunir los requisitos mínimos de acceso al nivel A establecidos en el artículo 14 del referido convenio”.

Vale recordar que la Unidad de Información Financiera (UIF) es, precisamente, el organismo con autonomía y autarquía financiera a cargo del análisis, tratamiento y transmisión de información a los efectos de prevenir e impedir el lavado de activos.

Volviendo a María Pía Monkes Calcaterra, la joven arrastra un historial que la hace especialmente poco idónea para integrar un organismo antilavado: en República Dominicana fue denunciada por fraude. En España, fue denunciada por evasión impositiva, sindicada por ser la administradora de  Inversora Andina Ibérica SL, una de las compañías que más evadió al fisco en ese país: se trató de un negocio de unos 7.366.548 euros. 

Con estos antecedentes, es poco probable que a “Ángelo” le espere, en los próximos meses, todo el rigor de su sobrina Pía. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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