Javier Milei, sobre la convertibilidad: “Yo propongo eliminar el Banco Central”

El polémico economista dialogó con RADIO REALPOLITIK. Durante la charla, Javier Milei se refirió a la posibilidad de la convertibilidad y al momento crítico que atraviesa la Argentina. “La especulación es parte del ser humano y gracias a Dios existe. Porque si nadie hiciera eso hubiéramos muerto hace tiempo, hubiésemos desaparecido como especie”, aseguró.

A continuación, lo más destacado de la entrevista.

RP.- Desde el gobierno de Estados Unidos hablan de la vuelta de la “convertibilidad en la Argentina”. ¿Usted lo ve factible?

Yo veo como solución una medida un tono más extrema, que es la de eliminar el Banco Central directamente. Ya sea por el caso de la convertibilidad o por el caso de la dolarización. Hay países que están dolarizados y han eliminado el Banco Central, como Ecuador por ejemplo.

Si vos tenés un sistema financiero de encaje fraccionario, es decir que uno deposita 100 pesos en el banco, y el banco guarda 25 y 75 lo presta; y eso vuelve a la calle; cada peso se multiplica por 3. Entonces, si todo el mundo pide sus depósitos en un mismo momento, primero los bancos responderían con los encajes y después ya tendrían que pedirle dinero al Banco Central. Eso pasó durante la convertibilidad.

Lo que pasó fue el que Banco Central emitía dando redescuentos y con esa plata los bancos le devolvían a la gente y lo que la gente hacía era comprar dólares. Hasta que llegó un momento en el que quedaban muy pocos dólares y no había más caja en los bancos con lo cual tuviste que llegar al corralito.

Como verás, la pata débil de estos esquemas es el sistema financiero de encaje fraccionario. Además, si vos estuvieras dolarizado, sería mucho más compleja, porque no podrías emitir dólares.

La realidad es que para hacer esos dos arreglos monetarios, tenés que asegurarte tener un sistema anticorrida. Yo lo propongo, se llama banca Saimong, trabajar con una suerte de caja de seguridad, caja fuerte, en donde vos dejas tu dinero y cuando vos queres retirar tu dinero, te lo dan. Ese es el primer caso.

Si a vos te gusta pagar tasa de interés, tendrías que ir a invertir tus fondos en una banca de inversión, entonces si vos lo hacés en un mal fondo y ese fondo quiebra; vos perdés tu dinero pero no se sociabiliza la pérdida.

Una vez que vos tenés desarrollado ese tipo de arreglo, para la banca deja de ser necesario que tengas un Banco Central. Establecés un régimen de competencia en monedas, y una vez que quedan establecidas las monedas que quiere el público, pueden ser euros, dólares, o todas ellas,  al Banco Central lo liquidás.

A los tenedores de bonos le vas a dar bonos y a los tenedores de pesos le vas a dar dólares, euros o lo que quieran. Y de esa manera no tendrá razón de ser el Banco Central, ni para velar la salud del sistema financiero, porque ya desarrollaste un sistema anticorridas, y tampoco lo tendrías para emitir dinero.

Con esto lográs erradicar la inflación, el sistema de precios comenzará a funcionar mejor, y la economía argentina tendrá tasas de crecimiento más interesantes. Vos pensá que cada vez que la inflación supera el 20 por ciento perdés 1,58 puntos de crecimiento. Con lo cual, eso puesto en perspectiva histórica desde que tenemos Banco Central, sino hubiera sido por la presencia de ese agente nefasto que es el que financia a la inmundicia del Estado, hoy tendríamos un producto pér cápita similar al de EE.UU. Y por otra parte, dejaría de ser un impuesto tan injusto que golpea tan fuerte a los pobres. El problema es que esto iría en contra de los intereses de las mierdas humanas que son los políticos.

RP.- ¿Te han consultado de algún espacio político?

En su momento me llamó Sturzeneger, he hablado con Sebastián Galiani. Dos economistas brillantes que ya no están más en el gobierno, al primero porque lo echaron y al segundo porque sus cuestiones personales y profesionales hicieron que se tenga que ir.

Hoy afortunadamente no tengo trato con ninguno de este gobierno lamentable. En algún momento me ha llamado Sergio Massa, por ejemplo, para discutir el tema de los contratos tarifarios. Como se podía hacer para minimizar el impacto en tarifas.

Por otra parte me ha consultado el diputado Olmedo, entre otros legisladores.

RP.- ¿Cree que si los fijadores de precios dejaran de especular, se resolvería el problema de la inflación?

La especulación es parte del ser humano y gracias a Dios existe. Porque si nadie hiciera eso hubiéramos muerto hace tiempo, hubiésemos desaparecido como especie.

Un especulador es un tipo que compra barato y vende caro. Cuando había abundancia de alimentos y el precio del alimento caía, aparecía el especulador y compraba esos alimentos. Y eso tenía algunos efectos positivos: Estoqueaba ese alimento y por otro lado hacía que no cayera tanto el precio. Cuando aparecía la escasez, el precio se iba a las nubes. Entonces el tipo asomaba con lo que había estoqueado y lo vendía a un precio no tan alto, y aparecía ese producto que le permitía a la gente comer sin que el precio fluctuara mucho. Ese especulador, que la mierda de los políticos lo quieren demonizar, en realidad es un benefactor social que ha salvado vidas humanas a lo largo de la sociedad. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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