Campaña “Más licencia por paternidad”: “Queremos poner en debate quién cuida y cómo lo hace”

Victoria Gallo, del área de políticas del equipo latinoamericano de justicia y género, dialogó con RADIO REALPOLITIK (www.realpolitik.fm) sobre la campaña "Más licencia por paternidad". “Por una serie de mandatos culturales y estereotipos de género, habitualmente somos las mujeres las que nos hacemos cargo”, aseguró.

A continuación, lo más destacado de la entrevista.

RP.- ¿De qué trata esta campaña?

Hace años venimos planteando la organización del cuidado y la organización social injusta del mismo. Esto significa que por una serie de mandatos culturales y estereotipos de género, habitualmente somos las mujeres las que nos hacemos cargo, no sólo del cuidado de niñas y niños sino también de adultos mayores, personas con una autonomía restringida, entre otras. Entonces en el caso de las licencias, o lo que llamamos tiempos para cuidar, lo que sucede es que los marcos normativos, las leyes que tenemos vigentes en Argentina, tienen esta fuerte impronta de una sociedad de hace años atrás. Entonces, por ejemplo, en la ley de contrato de trabajo, solamente hoy hay dos días de licencia por paternidad con goce de sueldo, para que los varones puedan cuidad a sus hijos e hijas que acaban de nacer. 

Las paternidades, las familias, han cambiado. Hay familias monoparentales, ensambladas, hay paternidad adoptiva, tenemos parejas del mismo sexo, y en eso la ley también está desfasada y anacrónica. Entonces, a través de esta campaña, donde decidimos ampliar la licencia por paternidad, lo que queremos en realidad hacer es poner en debate la cuestión de quién cuida, cómo lo hace y con qué facilidades.

RP.- ¿Hay países en los que  se decide quién va a tomar la licencia?

Hay distintos esquemas posibles. Una opción es una licencia de maternidad o si se quiere para la progenitora gestante, después tenés la licencia de paternidad y después hay una tercera opción, que está presente en varios países, que es la licencia parental. Ésa es una opción en la que la familia puede decidir cómo se distribuye, porque a veces es más conveniente que el padre o la otra progenitora se quede en casa y la otra persona salga a trabajar. Eso permite que cada familia tenga más libertad para decidir cómo va a organizar el cuidado. Esto está en muchos proyectos de ley de Argentina. 

RP.- Muchos empresarios deciden no tomar a mujeres por el miedo a que queden embarazadas y saquen licencia ¿Esta ley ayudaría también a la mujer en ese sentido?

Hay varios comentarios para hacer. En primer lugar la licencia la absorbe ANSES, o sea, es el Estado el que invierte, porque no es un gasto, sino una inversión social que se hace en pos de derechos, eliminar la pobreza, el desarrollo de una sociedad que está envejeciendo y tiene que apostar a generar una población económicamente activa que pueda sostener el día de mañana a todos nosotros que vamos a ser adultos mayores.

Aún así, hoy por hoy la licencia de maternidad extendida puede ser un factor discriminador o que algún empleador piense “mejor empleo un hombre y no una mujer, porque si ella está en edad fértil puede tener un bebé y me perjudica”. En realidad lo que hay que lograr como objetivo, a mediano y largo plazo, es que las licencias sean exactamente iguales, para que le de igual al empleador a quién contrata, porque total ambos se van a tomar una licencia para cuidar a ese niño o niña. Otro problema que tiene esta ley, hoy por hoy, es que reconoce a los nacimientos pero no a las adopciones. 

RP.- ¿Cuáles son las principales trabas que ve hoy en día para este tipo de leyes?

Hay distintos tipos de obstáculos que perjudican que la norma se pueda cambiar. Por un lado, el temor de las empresas y las cámaras empresarias por los costos que pueden asumir, aunque sean indirectos. Por otro lado también mandatos culturales, asumimos que es norma, está bien y es natural que seamos las mujeres las que nos quedamos en casa a cuidar y que el padre tiene un rol auxiliar y complementario. Esa idea hay que cambiarla. Eso es algo que como sociedad tenemos que ir poniendo en debate también, el padre tiene derecho a estar compartiendo ese primer tiempo con sus hijos. Junto con esto, otras licencias también, porque un niño es un compromiso a largo plazo y no alcanza sólo con algunos días cuando nace. 

Ése es un tema que hay que superar, la lógica del costo. Hay un montón de estudios en el mundo que demuestran que no es un costo sino una inversión. Por un lado por la justificación de Derechos Humanos, es decir, tenemos derecho a cuidar y a ser cuidado. Pero además, hay motivos económicos para apoyar las licencias con goce de sueldo, porque invertir en infancia tiene un retorno enorme en relación al desarrollo, fortalecer la población económicamente activa, entre otras cosas. La población argentina está envejeciendo, o sea que si vos lográs distribuir de manera más justa el cuidado, podés lograr que más mujeres entren y se sostengan en el marco laboral y eso es en beneficio de toda la sociedad. Hay que pensar más allá del costo hoy, a corto plazo, y pensar en una inversión en medidas de largo plazo. 

RP.- ¿Esto logra un mayor bienestar para la familia?

Sí, está demostrado. En el corto plazo ayuda a sostener la lactancia, que no es un tema menor, en el cual también es fundamental que haya una persona acompañando. Además del vínculo que se genera con el otro progenitor, que no gestó, en el que es fundamental la cantidad de tiempo que pasa con los chicos.

Algo que nos importa mucho destacar es que, hoy por hoy, la mitad de la fase de trabajo no tiene ni un solo día de licencia, porque si sos monotributista o autónomo no tenés. Entonces hay que reformar todo el sistema de licencias de la Argentina. Sería lo ideal.

RP.- ¿Cómo ve el tema de la adopción con respecto a las licencias?

Yo creo que eso es lo que tiene más posibilidades de salir. Hay un consenso entre todas las fuerzas políticas de que adopción tiene que estar en la norma y que hay que equiparar los derechos de lo que es la maternidad y paternidad adoptiva con la biológica. No puede ser que un niño tiene más o menos derechos en función al tipo de familia al que pertenece.

Hay muchos proyectos de ley que no sólo proponen días de licencia una vez que se te otorga la guarda, sino que también días previos. Porque si estás en un proceso de adopción tenés trámites previos, visitas, y eso requiere tiempo. Hay proyectos de ley que prevén eso, junto con la protección ante la presunción de despido, porque muchas veces pasa que las personas que quieren encarar un proceso de adopción cuando lo notifican a un empleador o empleadora están expuestos a esto. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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