La mujer que denunció a funcionario por acoso responsabilizó al intendente Carlos Arroyo

Daiana Siano había denunciado al secretario de Economía y Hacienda de General Pueyrredón, Hernán Mourelle, hace algo más de un mes y hasta el momento no había dado declaraciones, manteniendo un hermetismo con respecto a su reclamo que advertía una grave acusación. Fue durante esta semana que se animó a dialogar con la prensa local y redobló la apuesta al destacar que el intendente de Mar del Plata, Carlos Arroyo, estaba al tanto de lo sucedido.

La empleada se acercó a la comisión de Derechos Humanos del Concejo Deliberante acompañada de su mamá, junto con la secretaria de Genero del Sindicato de Trabajadores Municipales (SMT), María de los Ángeles Irazábal, y la secretaria adjunta de la Central General de Trabajadores, Adriana Donzelli. “Decidí denunciar primero por mí misma y, segundo, por cualquier otra persona que puede estar pasando por lo mismo”, comenzó la denunciante.

Y continuó con cierto desánimo ante la situación que le toca vivir: “Quería ver cuáles eran las actuaciones que se tomaban, pero ni siquiera un sumario administrativo tiene esta persona. Ni siquiera para ver qué pasó con el pedido que el intendente firmó dos veces -respecto de una bonificación que le correspondía a la mujer- y esta persona (Hernán Mourelle) pasó por alto”. Así mismo, advirtió que esta actitud pasiva por parte de la gestión municipal es la que hace que su denuncia sea trasladada ahora a los medios.

Sobre las medidas tomadas en el marco de su denuncia y el traslado contó: “Me cambiaron de área arbitrariamente; me enteré por los medios, yo no recibí la notificación, tuve que venir a notificarme yo porque supuestamente me notificaron a mi domicilio, pero no sé quién firmó porque yo no la recibí”.

Desde el STM y la CGT repudiaron la inacción de la gestión municipal que ni siquiera tomaron medidas precautorias y prácticamente se lavaron las manos dejando el hecho impune. Asimismo, destacaron que hay una “revictimización de la mujer a través de ataques públicos y descalificaciones por parte del propio Mourelle, siendo sometida ahora a un traslado compulsivo”.

Finalmente, Irazábal y Donzelli reafirmaron su solidaridad con “Daiana y todas las mujeres que están siendo víctimas de un trato misógino y discriminatorio por parte del funcionario y del propio intendente municipal”. En este sentido, se le reclamó a la gestión la finalización de las agresiones y la persecución que le está realizando a la empleada, conjuntamente con su pronta intervención para evitar casos similares.

Vale recordar que allá por finales de agosto, la mujer había realizado una presentación en la Fiscalía Nro. 4 en la que acusó al funcionario municipal por acoso laboral. La situación produjo un fuerte stress que se acentuó cuando pasó a ser trasladada del área de Protocolo y Ceremonial, en la que estaba desde hacía siete años, a la dirección de la Mujer. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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