Petrecca designó como secretario de Modernización a un recurrente ganador de licitaciones municipales

En una vergonzosa medida tomada por el intendente del municipio de Junín por Cambiemos, Pablo Petrecca, sumó a su equipo a un proveedor del estado local que fue beneficiado en diferentes licitaciones. Se trata de Juan Martín Zaballa quien alrededor de hace un mes asumió el compromiso de dirigir la cartera de Modernización y que, a su vez, es dueño de una empresa que ha proveído durante este año cámaras de seguridad a la comuna.

Según fuentes a las que pudo acceder REALPOLITIK el nuevo integrante del gabinete juninense llegó a su cargo luego de ser recomendado por el propio secretario Legal y Técnico de aquella localidad, Adrián Felman. El abogado habría dado buenas referencias del ex proveedor y nuevo funcionario del clan Petrecca.

La empresa desde donde Zaballa prestaba sus servicios era una sociedad denominada ZG Multitec S.R.L. que tiene como objetivo, según su acta constitutiva, la “…compra, venta producción, distribución representación, y leasing de software y hardware, equipos de radio, televisión y telecomunicaciones en general, sus partes, accesorios y/o piezas, análisis, desarrollo o implementación de sistemas en programas de investigación…”, entre otras actividades.

Desde dicho emprendimiento, y estando solo de un lado del mostrador, logró un negocio envidiable: ganaba un promedio de 1.315.282 mensuales.

Desde esta sociedad, el secretario de Modernización junto a sus socios participaban de las compulsas tecnológicas que la municipalidad de Petrecca llevaba adelante para la compra de insumos que justamente ZG Multitec comercializaba. En este sentido, el 16 de enero del 2015 a través del decreto 233, la mencionada empresa proveyó con cámaras de seguridad a la comuna de Junín para ser instaladas en edificios educativos.

Asimismo, el 16 de abril de este año nuevamente la prestataria del funcionario fue favorecida para aportar equipamiento referente al centro de monitoreo juninense. Esta vez, fue por medio del decreto 1255 con una suma que superaba los 534 mil pesos y refería a la licitación privada número 5/18.

Si bien el hecho no consuma un delito, visto que en la fecha mencionada el actual funcionario no ejercía tareas en el ejecutivo juninense, representa un acto que al menos promueva la duda sobre la ética de algunos funcionarios que negociaban con la comuna y ahora son parte de la misma. Algo así como una especie de dueño/cliente que se encuentra de ambos lados del mostrador.

Por su parte, Pablo Petrecca, que estaba en el ojo de la tormenta luego de haberse mudado en abril a una mansión de 500 mil dólares, vuelve a tomar una decisión que remite a la duda y que choca con la ética pública de lleno y roza el concepto de corrupción. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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