En Navidad, la municipalidad de La Plata desarticuló cincuenta fiestas clandestinas

El secretario de Convivencia y Control Ciudadano de La Plata, Roberto Di Grazia dialogó con RADIO REALPOLITIK (www.realpolitik.fm) sobre las fiestas clandestinas y, en particular, del evento que tuvo lugar en calle 10 y 63, donde un funcionario municipal resultó apuñalado. “Muchas veces el festejo es propiciado por los propios padres”, manifestó.

A continuación, lo más destacado de la entrevista.

RP.- ¿Cómo resulta herido el funcionario municipal? ¿Tiene más datos de esta fiesta que se realizó en 10 y 63?

Sí, por denuncias que los vecinos estaban haciendo a la línea de la municipalidad nos llega la información de que se estaba realizando un evento con corte de calle en 10 y 63.

Algunos vecinos no podían ingresar a sus domicilios, otros se quejaban por los ruidos molestos y cuando llegamos al lugar conjuntamente con la Policía Local vimos que había mucha cantidad de público, menores bebiendo alcohol, venta de alcohol en la vía publica, autos con gran cantidad de parlantes y música fuerte.

Se acercan los inspectores y los policías piden a la gente que se retire, ahí se acerca el director de Nocturnidad, Emanuel Reyes, para hablar con uno de estos individuos que estaban en un vehículo para que desista y se retire. Ahí una persona empieza a arrojar botellas a la policía y otra se acerca a Emanuel y le propicia esos dos puntazos, uno en la zona de los pulmones y otro en la zona baja del estómago.

El funcionario está bien, recuperándose de la herida, con dolores, porque fueron tajos profundos que le propició, por suerte no se le perforó un pulmón, estuvo a un centímetro de que sucediera, esa era nuestra preocupación. Por eso, cuando estuvimos esperando en la guardia y nos dieron la noticia de que estaba bien, en ese sentido, nos alegramos mucho.

RP.- Cuando se inaugura la gestión, se tuvo que lamentar una víctima fatal en una fiesta clandestina, quizá este modo de hacer eventos venía de antes. ¿Se ha reducido el número? 

Realmente sí, estas fiestas venían desde antes, lo que pasa es que la gestión anterior no le daba la importancia tal y, cuando hubo sucesos, se taparon. Así que a los veinte días que empezamos la gestión tuvimos el tema de Emilia.

Todos los años se hacían estos eventos y nos encontramos con esa fiesta que fue caótica, pero nosotros año a año lo que hicimos fue trabajar, planificar, para darle respuesta a esta problemática. No es que uno está en contra de que los jóvenes festejen sino de que ese festejo no tiene límites y muchas veces es propiciado por los propios padres.

Nosotros en Navidad desarticulamos cincuenta fiestas y muchas veces los mismos padres le dan a sus hijos lugares con piletas y realmente no llegan a entender la complejidad de la problemática porque hay menores que ya vienen de los festejos alcoholizados y están al lado de la pileta sin tener seguridad, sin un guardavida, no se conocen entre ellos porque se convocan por redes sociales.

Entonces realmente es problemático, que los mayores que tenemos que ponerle los límites a los más chicos, dejemos hacer y no estemos atentos, realmente nos preocupa. Estuvimos en este 24 de diciembre trabajando arduamente y notamos que hay una falta de conciencia.

RP.- Se está promocionando un gran baile popular en 68 y 118, el jueves donde tocan algunas bandas, ¿tiene esta información?

Sí, nos llegó a nosotros antes de todos y la mandamos a los medios para empezar a disuadir y que ese evento no se haga.

Se ponen a hacer fiestas sin la autorización municipal, no están planificadas, ni pensadas y esto hace que puedan tener inconvenientes y la queja de vecinos porque hoy ponen un escenario en la vía pública y cualquiera hace un evento.

Entonces tenemos que empezar a cambiar esta realidad. Nos pasa en las facultades, esto fue en la vera de Trabajo Social. Nos pasa en Bellas Artes, donde también cortan la calle cuando quieren y los vecinos se quejan. El “dejar hacer, dejar pasar” viene de antes, tenemos que empezar a cambiar la mentalidad y que las normas se empiecen a cumplir.

RP.-  Si participan bandas también estas tendrán responsabilidad…

Sí, esto es como Cromañón, donde la banda también tuvo responsabilidades, hubo connivencia de todas las partes. En ese sentido, nosotros cuando hay fiesta clandestina atacamos al disk jockey porque es una parte fundamental para que el evento se haga, sin música esa fiesta no se haría.

Entonces las responsabilidades tienen que estar en todos y les caben a todos: organizadores, en este caso a las bandas, los disk jockey y los que venden alcohol. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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