Bonadeo: “Habría que preguntarle a Blanco si en los hoteles que tiene, paga por servicios que no usa”

El periodista deportivo Gonzalo Bonadeo dialogó con RADIO REALPOLITIK  y opinó sobre la nota de “Pelota Dividida” en la cual se da a conocer la decisión del presidente de Racing, Víctor Blanco, de cobrarle a los socios vitalicios del club. Además se refirió al reciente DNU por el cual se creó la Agencia de Deportes: “Lamentablemente, en todo esto, la clave de la cual no se habla es el tema del presupuesto”.

A continuación, lo más destacado de la entrevista.

RP.- ¿Qué opina del pase de secretaria a agencia de deportes?

Hay varias aristas, primero no hay ninguna urgencia, con lo cual el decreto de “necesidad y urgencia” para mí es abstracto, no hay ninguna urgencia en hacer esto, efectivamente no la hay. Segundo, hay una experiencia de agencia en Córdoba que aparentemente fue buena, no puedo decir si fue tan buena o no y además no es lo mismo una provincia que un país. Tercero, no me gustan las autoridades del deporte que hay a nivel nacional como tampoco me gustaron varias de las anteriores.

No me gustó Carlos Espínola, ni Claudio Morresi, menos el primero que el segundo y para nada el señor que está ahora Diógenes de Urquiza que va a tener conflicto de intereses. Fue un error grave que cometieron al convocarlo, más a un año de terminar un gobierno, no es serio como tampoco lo fue en el 2014 cuando fue nombrado Espínola, un año antes que terminara el gobierno de Cristina Kirchner.

De un lado te dicen que hay una urgencia porque Deporte es un nido de kirchneristas y no me consta que así sea y del otro te dicen que van a privatizar el deporte y tampoco me consta que eso vaya a pasar.

Más allá de más o menos razones o más o menos peligro, de ninguna manera se está atendiendo lo importante del deporte que es la falta de presupuesto, la falta de recursos, la necesidad de vincular el deporte en las escuelas que es decisivo y convertir el deporte en una herramienta inclusiva que es fundamental, en todo el DNU no figura cuánta guita va a significar todo esto.

En la Argentina no existe una política deportiva y en esto voy desde año 1973 hasta acá, nunca se desarrolló una política deportiva seria.

Lamentablemente en todo esto la clave de la cual no se habla en el DNU es el tema del presupuesto, este decreto de necesidad y urgencia necesita un presupuesto entre cinco y diez veces mayor del que tiene el deporte argentino y no lo va a tener.

RP.- Sobre el tema del superclásico, habiendo pasado un tiempo, ¿se puede hacer otra conclusión?

Pasó y no pasó nada, o sea, sí pasó, hay 300 barras de River que no podrán entrar, es muy probable que en los próximos días se conozca que hay más de 250 barras de Boca que tampoco van a poder entrar en la cancha. Pero el episodio en sí, la suspensión del partido quedó como que es un lobo solitario tenía una botella de cerveza llena y eso fue todo pero la verdad que no fue todo eso, fue mucho más grave, un disparate.

En lo futbolístico, no creo más en Papa Noel y en el héroe que nos venga a resolver los problemas, tenemos que empezar a poner las pelotas sobre la mesa nosotros como sociedad futbolera, de qué manera: repudiando a los barras, no comprándole entradas truchas. Como las bondiolas que venden en la puerta de la cancha de River no he comido en mi vida y me encanta que la gente gane como pueda el pan que lleva a su casa pero si esos son puestos de barras bravas, sacalos, saquemos los trapitos y los barras bravas. No es lo mismo un señor que trata de bancar su casa con cuarenta mangos que vos le podes tirar frente a restaurante o un cine que una banda de mafiosos que cobran 400 mangos por dejar el auto en un partido de futbol, no es lo mismo, son cosas diferentes.

RP.- ¿Por qué lo central en nuestro país es el fútbol y no otro deporte?

En primer lugar en todos los países hay un deporte más popular que otro pero acá llegamos a una desmesura, yo no encuentro una explicación, una razón, la explicación está en que lamentablemente el fútbol es todo.

A mí me apasiona el fútbol y el deporte y entiendo que el fútbol puede ser una herramienta decisiva para una sociedad  pero no desde el fenómeno barras o del profesionalismo sino desde el fenómeno de la inclusión.

Hay un grupo de chicas que trabajan en el futbol en las villas, especialmente en la  Villa 31 y me   contaban los problemas que tenían para lograr que les dieran una hora de cancha a las pibas de la villa. Entonces recapitulemos, estamos hablando de las zonas más sensibles, humildes y populares de Argentina, los que debieran ser los más inclusivos comprendiendo la lógica, ¿y los flacos que viven ahí les prohíben a las minas jugar al fútbol? ¿De verdad? Eso pasa en el Club Universitario de Buenos Aires (C.U.B.A.) que es el lugar más elitista de la Argentina, ¿y pasa también en las villas con las chicas que juegan a la pelota? Es un camino muy largo y muy difícil.

RP.- En la sección "Pelota dividida" se publicó que el presidente de Racing Víctor Blanco persuadió a los socios vitalicios tratándolos con premios para que sigan pagando la cuota.

Habría que preguntarle a Blanco si en los hoteles que tiene paga por servicios que no usa o paga dos veces por un servicio que ya pagó. Cuando sos vitalicio, ya está, no tenés que pagar más nada.

Yo quisiera que alguna vez que los presidentes de clubes de fútbol, que además son emprendedores privados, asuman que tienen que tener mucho más cuidado con las cosas de los clubes que con las que tienen en su propia empresa. Entonces cuando un tipo echa a cuatro técnicos por año quiero que me diga si echaría a cuatro gerentes de su empresa en el mismo período, con los costos que ello implica y si contrataría a un gerente para que esté tres meses, en el fútbol, lo hace.

Entonces hay un recorrido largo y lo que digan las personas cada vez me importa menos, voy a lo fáctico y obviamente me interesa a dónde y cómo terminan las cosas.

RP.- ¿Aceptaría un cargo en el deporte?

No tienen por qué recordarlo pero yo soy una de las pocas personas que le dijo que no a Néstor Kirchner. Estaba a cinco minutos de ir a asumir como secretario de Deporte en el año 2003. En una oficina que estaba en Balcarce y Humberto Primo me reuní con Alberto Fernández y Miguel Nuñez, con quienes había tenido varios encuentros y les dije: "Banquenme, no puedo conocer a mi jefe diciéndole: ‘Sí, juro’".

De inmediato lo nombraron a Roberto Perfumo y yo les dije: “Si a ustedes les interesa lo que yo pienso, súmenme, no necesito un cargo para trabajar”. Pero bueno, nunca me llamaron.

Sí participo desde mi lugar crítico, no me interesa radicalmente el espacio público, de ninguna manera, pero sí trabajar. Me parece que hay necesidad de trabajar junto con una cantidad de gente que también tiene ganas de hacerlo pero no se los convoca, entre otras cosas porque la dirigencia tiene miedo de que aparezcan personas idóneas. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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