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10 de febrero de 2019 | Municipales

¿Mano a Mano?

Olavarría: Galli comienza a delinear su reelección y ya tiene oponente

Ante un eseverrismo dubitativo, el concejal de Unidad Ciudadana Federico Aguilera confirmó su candidatura para suceder al actual mandatario de uno de los principales partidos de la séptima sección electoral.

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“Voy a ser candidato a intendente”, informó el edil a una radio local para cortar con las elucubraciones sobre su futuro y dar celeridad al comienzo de la sumatoria de apoyos desde una unidad que se propone a nivel nacional y sería épico se replique en Olavarría mediante su liderazgo.

Sin embargo, desde el eseverrismo, que hoy cuenta con una importante devaluación tras echar por tierra lo cosechado en su momento por el padre de José y coquetear en un ida y vuelta entre el armado massista y kirchnerista, no han dado una definición certera sobre si acompañan o ponen palos en la idea de un Aguilera intendente.

Lo que se sabe desde ambos sectores es que no se desea un nuevo mandato del hoy jefe comunal Ezequiel Galli y mucho menos una perpetuación de Cambiemos en la intendencia, que podría hacer que el peronismo reinante de otras épocas corra con una desventaja en futuras elecciones tras ocho años fuera del ejecutivo local.

Asimismo, Eseverri había afirmado en una cena -allá por diciembre, en el club Ferro- que su espacio debía volver a ser gobierno. Pero, en un hábil juego dialéctico, no se mencionó como un posible candidato y hasta admitió que postergaría su figura -cuestión que, por su ego, podría ponerse en duda- por el redito de sacar a su sucesor del palacio municipal olavarriense.

En ese marco, Aguilera buscará seguramente un apoyo desde su armado sin tener el déficit de postergar grandes espacios de cara a un posible gobierno que perdería credibilidad antes de asumir si Eseverri los señala como parte de los suyos. En este sentido, el ex intendente hoy es más un salvavidas de plomo que un canalizador de votos.

El sueño de un vecinalismo ya vencido desde el arranque, sin acuerdos con Unidad Ciudadana, es el que mantiene viva la esperanza de una continuidad en Cambiemos. Si bien la gestión oficialista no fue de lo mejor, se permitió recuperar cierto sentido de identificación del vecino olavarriense con sus mandatarios, aportando soluciones a muchas de las problemáticas que en su momento habían heredado del gobierno saliente.

Lo importante es que Galli, quien se pronunció en contra de las PASO, cuenta con la juventud como para aportar cuatro años más al hacer político local y su proyección fuera del pago chico propone esperanza para el armado de Cambiemos de cara al futuro. Aunque, el no desdoblamiento, trae problemas para muchos intendentes amarillos que sufren en sus localidades la falta de trabajo y la emergencia social. (www.REALPOLITIK.com.ar)


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